Las llamadas a revisión de coches se han convertido en algo habitual. Cada semana se publican decenas de avisos preventivos por riesgos para la seguridad, aunque sean por pequeños fallos. En la lista de alertas que pùblica cada semana la Comisión Europea comienzan a ser habituales también los avisos que afectan a patinetes eléctricos y otors dispositivos de micromovildiad personal. Desde 2022, un total de 25 modelos de patinetes eléctricos han recibido avisos por riesgos para los usuarios, que incluyen también el fuego o la explosión.
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Los episodios de incendios causados por patinetes eléctricos en trenes, metros o autobuses están provocando su destierro del transporte público. En Barcelona ya se ha aprobado la prohibición en el transporte público y en Madrid está sobre la mesa después del último episodio por la explosión de la batería de un patinete en el metro.
Defectos de patinetes eléctricos
Los avisos por defectos de fabricación de los patinetes no son algo extraño, sino, al contrario, son cada vez más frecuentes. En 2022 se registraron alertas que afectaron a nueve modelos de patinetes por riesgos de diferentes tipos que incluyen también el de incendio. De enero a octubre de 2023, la cifra de avisos por problemas de seguridad de patinetes en la UE casi doblan los de todos el año 2022. Se ha pasado de 9 en todo el año pasado a un total de16 avisos contabilizados hasta el día 20 de octubre. En total hay 25 modelos con problemas de seguridad desde 2022.
En los avisos por riesgo de que el patinete sufra fuego, predomina la misma causa: "La batería no tiene un dispositivo que controle la temperatura de las celdas y puede sobrecalentarse durante la carga", se indica en las alertas.
Pero el peligro de incendio no es el único riesgo que presentan esos 25 modelos que han recibido avisos de seguridad desde 2022. También abundan los problemas potenciales para la salud de los usuarios y el medio ambiente por un contenido excesivo de plomo, por ejemplo. Entre los modelos afectados hay un dominio absoluto de los 'scooters' fabricados en China con marcas de ese país o de otros estados.
Riesgo elevado en el transporte público
La Autoridad del Transporte Metropolitano de Barcelona (ATM) ha justificado el destierro de los patinetes debido a que "no se ha podido establecer ningún escenario en el que no se mantenga un factor riesgo muy elevado no tolerable" para los operadores. "Se debe tener en cuenta que el impacto de una deflagración de una batería de estos VMP (vehículos de movilidad personal) en el transporte público puede ser muy elevado, sobre todo por la alta densidad de viajeros en determinadas franjas horarias cada vez más amplias", la presencia de túneles o la imposibilidad de evitar que coincidan con colectivos vulnerables como personas con movilidad reducida, niños o bebés.
El veto a la entrada de patinetes eléctricos en el transporte público supone una dificultad para la intermodalidad, la tendencia dominante en la nueva movilidad por la que los usuarios combinan trayectos con varios medios de transporte. El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ofrecerá como una ampliación de más de un 20% del espacio de aparcamiento Bicibox como "alternativa para combinar los patinetes eléctricos con el transporte público".