El incendio de un coche eléctrico de Tesla en Barcelona ha provocado importantes efectos en los vecinos del párking subterráneo afectado. La marca norteamericana que encabeza Elon Musk ha puesto en marcha una investigación del suceso, que al parecer se originó en las baterías del vehículo.
El coche ha sido retirado ya del interior del aparcamiento y será trasladado a la sede europea de Tesla en Ámsterdam con el fin de investigar la causa del fuego, según han explicado algunos vecinos afectados. El vehículo calcinado por completo es un Tesla Model 3 (no un Model S como apuntaron algunos vecinos inicialmente) que se encontraba enchufado a un punto de carga situado en el párking y cargando las baterías.
La compañía aseguradora ha indicado a los vecinos que se trata de un incendio excepcional del que se han contabilizado tres casos en todo el mundo con las mismas circunstancias. Al parecer, el coche siniestrado fue adquirido por su propietario hace unos años.
Incendio de un Tesla en un párking de Barcelona / TWITTER
Factura de los daños
La primera evaluación apunta a una abultada factura por los daños causados por el incendio, para cuya extinción fueron necesarias varias horas en las que se registraron temperaturas muy altas. El cuerpo de bomberos de la ciudad de Barcelona desplazó al lugar del incendio, en el pasaje de Mas de Roda del barrio del Poblenou, tres autobombas, una autoescalera, una ambulancia, dos vehículos de mando y un camión de aire y ventilación para disipar el espeso humo que se había concentrado en el aparcamiento a raíz de las llamas del Tesla Model 3
Las llamas provocaron daños importantes en otros vehículos aparcados junto al Tesla Model 3 y dejaron inservible la instalación eléctrica, un sistema de climatización y las bombas de extracción de agua del aparcamiento, según explican algunos vecinos afectados. De momento, los bomberos solo han dejado entrar en el párking durante unos minutos a los propietarios, aunque protegidos con medidas para no inhalar o impregnarse del humo tóxico.
Otros incendios
Este no es, ni mucho menos, el primer incendio sufrido por un vehículo de Tesla o de algún otro modelo eléctrico de otros fabricantes. Tras estos fuegos espontáneos de automóviles eléctricos mientras cargan o incluso desenchufados se encuentran a menudo fallos en el aislamiento de los cientos de celdas que componen la batería que han provocado llamadas a revisión para llevar a cabo su sustitución.
Tras una oleada de incendios, Tesla respondió que los incendios de sus vehículos "son eventos excepcionalmente raros" y aseguraba que sus vehículos habían sufrido un incendio por cada 170 millones de millas recorridas, una proporción mucho más baja que la del parque automovilístico general, que registra un coche incendiado por cada 19 millones de millas recorridas.
