Las restricciones de tráfico en las grandes ciudades se van imponiendo. Después de Madrid Central y su reconversión en Madrid 360, Barcelona pone en marcha en 2020 su zona de bajas emisiones. Son dos ejemplos que han causado un amplio debate en la sociedad pero que se van abriendo camino. El 60% de los españoles se decantan a favor de estas medidas al considerar que son eficaces para reducir la contaminación en las ciudades, según la Radiografía de los hábitos de movilidad de Alphabet España.
Las restricción de la circulación en función de las etiquetas ambientales de la DGT es una medida eficaz para el 60% de los españoles y el 62% de los madrileños, que fueron los primeros en resultar afectados con Madrid Central. El grado de aceptación con la prohibición del estacionamiento en el centro de las ciudades para vehículos sin etiquetas verdes o de ningún tipo tiene menos aceptación, un 43% en España y un 52% en Madrid.
Desconocimiento de las etiquetas
La aceptación social es todavía más baja en el caso de la reducción de la velocidad en las vías de acceso o que circundan las ciudades, al llegar a un 21%.
Sin embargo, los encuestados en el estudio promovido por el Foro de Movilidad de Alphabet demuestran un gran desconocimiento con el sistema de etiquetado de los vehículos en función de su motorización. El 73% de los españoles y el 60% de los madrileños no saben ordenar correctamente los distintivos ambientales. Además, el 54% asegura que no ha colocado la etiqueta en el parabrisas del coche.
El 78% de los españoles estaría a favor de promover ayudas para fomentar el transporte público, preferido por la comodidad (40%) y el ahorro (15%), aunque el 75% cree que su ciudad no está adaptada a la convivencia con nuevos medios de transporte.
Interés por eléctricos, pero poco uso
El coche continúa siendo elegido como medio de transporte principal por un 58% de los encuestados. Cuatro de cada diez españoles (el 40%) no cambian su vehículo hasta que cumple los diez años, mientras que el 20% lo hace entre los 8 y 10 años, siendo la principal causa las averías (49%), según un estudio elaborado por el Foro de Movilidad promovido por Alphabet.
La predisposición de los españoles a adquirir coches menos contaminantes va del 46% que elegiría un híbrido, un 23% de gasolina y un 15% de diésel. Aunque hay un 75% de ciudadanos que muestra interés en conducir un coche eléctrico, solo un 5% de los españoles utiliza o ha utilizado un vehículo eléctrico alguna vez. Las principales barreras son la escasez de puntos de recarga, su coste de adquisición o su poca autonomía.
"El porcentaje de matriculaciones de vehículos eléctricos es aún pequeño y no podemos condicionar una movilidad más sostenible solo en ellos, porque necesita su periodo de asentamiento", aseguró la consejera delegada de Alphabet España, Rocío Carrascosa. Por ello, propone fomentar medidas de renovación del parque "con vehículos de última generación" y pensar "qué podemos hacer desde mañana mismo".
