El impulso y el compromiso con la electrificación de la movilidad están a punto de pasar el examen de los Presupuestos Generales del Estado de 2023. Entre las más de 4.300 emmiendas presentadas por los grupos parlamentarios de la oposición se encuentran algunas impulsadas por Anfac que pretenden allanar el camino para los vehículos eléctricos.
La Comisión de Presupuestos del Congreso acaba de comenzar el debate de enmiendas parciales al proyecto de Presupuestos de 2023. Los partidos que forman el Gobierno (PSOE y Unidas Podemos) necesitan un apoyo extra para el que confían en el PNV y ERC.
Anfac ha negociado con los grupos del PP, Ciudadanos y PdeCat la presentación de una decena de enmiendas a aumentar y facilitar las ayudas a la compra de coches eléctricos y a la instalación de puntos de carga mediante cambios en la fiscalidad. También ha habido contactos con ERC para lograr su apoyo. Para los fabricantes de automóviles, no es de recibo que en la actual situación de caída profunda de las ventas de automóviles en relación con 2019 las arcas públicas de Hacienda registren importantes aumentos de los ingresos procedentes del sector del automóvil.
Ingresos extras para Hacienda
Por un lado, el cambio en las mediciones de emisiones con el protocolo WLTP está disparando lo que ingresan las autonomías por el impuesto de matriculación. Además, la recaudación por IVA también ha crecido al subir el precio medio. El Estado gana incluso con los carburantes y una vez descontado el efecto del descuento de 20 céntimos por litro. En total, las administraciones ingresarán en 2024 más de 1.000 millones adicionales procedentes de la automoción. Además, la recaudación por el impuesto de hidrocarburos ha aumentado en 1.000 millones en el primer semestre de 2022, según las estimaciones de Anfac.
"Esto hace que el vehículo sea una fuente de ingresos para las Administraciones ya que actualmente, de media un vehículo nuevo está pagando 280 euros más por el impuesto de Matriculación y 925 euros más por IVA. En total las arcas públicas están ingresando por cada vehículo 1.200 euros más que en 2019", según explica Anfac..
Con este gran colchón por el negocio que está haciendo el Estado con el automóvil, los fabricantes piden algunas modificaciones en la fiscalidad para que salga más a cuenta invertir en la electromovilidad. En primer lugar, Anfac pide que se rectifique lo que considera como una anomalía en Europa que consiste en que las ayudas del plan Moves no tributen como ganancia patrimonial en el IRPF. De esta manera, los 7.000 euros por la compra de un coche 100% eléctrico sería una subvención neta, sin la sorpresa de última hora en la declaración de la renta. Los grupos del PP, Pdecat y Ciudadanos han presentado enmiendas en esa línea. Anfac estima que este cambio supondría una merma en los ingresos de Hacienda de unos 180 millones.
Ventajas fiscales
Adicionalmente, otra enmienda a los Presupuestos plantea dar un salto mediante la deducción en el IRPF del 15% del gasto por la compra de vehículos electrificados y de puntos de carga con un tope de 4.000 euros. Esta propuesta pretende extender la deducción que ya aplican algunas comunidades como Castilla y León, Navarra, la Rioja y Asturias.
Además, los fabricantes proponen aumentar la deducción por la entrega de un coche eléctrico de empresa del 30% actual al 70% para que España se alinee con otros países europeos. Esta enmienda la ha presentado el PdeCat.
Las ventajas fiscales propuestas por los fabricantes incluyen también una amortización acelerada que duplique el coeficiente lineal máximo previsto para inversiones en vehículos electrificados.
Con el fin de solventar uno de los hándicaps de la red de carga, una enmienda del PdeCat propone, a instancias de Anfac, destinar una partida específica de 300 millones a subvencionar los puntos de alta potencia a partir de 150 kW.
