La relación de Elon Musk con Twitter va camino de convertirse en un culebrón. El emprendedor y consejero delegado de Tesla y SpaceX entre otras compañías acaba de lanzar una OPA de 40.000 millones de euros para comprar la red social mientras se enfrenta a una denuncia por un supuesto enriquecimiento ilegal mediante la especulación retrasando la información pública de que había comprado el 9,2% de Twitter. La OPA llega tras la marcha atrás de Twitter para que el magnate entrara en su consejo de administración.
El nuevo acto en el culebrón es una oferta para comprar la red social que, según Musk, supone una prima de un 54% en relación con el valor que tenían cuando el emprendedor empezó a comprar acciones. Sin embargo, los 54,20 dólares son apenas cuatro dólares más respecto al máximo alcanzado después del subidón al hacer público Elon Musk que poseía el 9,2% de los títulos de Twitter.
OPA de Musk por Twitter
"Es mi mejor y definitiva oferta y si no es aceptada, tendría que reconsiderar mi posición como accionista", advierte Elon Musk en una carta publicada por varios medios estadounidenses en la que defiende que Twitter necesita transformarse en una "empresa privada" ya que en su opinión, no puede "ni prosperar ni servir" a la libertad de expresión en su estado actual.
Poco antes de lanzar esta OPA, un juez de Manhattan recibió la denuncia interpuesta por accionistas díscolos de Twitter encabezados por Marc Rasella, que acusan a Elon Musk de ocultar información para especular en bolsa con los títulos de la red social para beneficiarse de un precio bajo en su carrera por comprar hasta el 9,2% del capital. Este pleito se suma a otros en los que se ha visto envuelto Elon Musk en los últimos años por sus compras y ventas de acciones de Tesla y por la información que daba precisamente en Twitter antes que a los accionistas directamente. Esos hechos motivaron que la Comisión de Valores de EEUU impusiera a Elon Musk una multa y su degradación de presidente a consejero delegado de Tesla, así como un control de sus mensajes en la red social, en la que sus seguidores siguen subiendo y se acercan ya a los 82 millones.
Compra de acciones desde enero
Según la denuncia disponible en internet, Elon Musk comenzó a comprar acciones de Twitter en enero de 2022, coincidiendo con el recrudecimiento de sus críticas a la red social por la censura aplicada sobre algunos mensajes y cuentas, un argumento similar al que empleó Donald Trump tras el cierre de su perfil por el asalto al Congreso de EEUU.
Musk aumentó su participación por encima del 5% de Twitter el pasado día 24 de marzo, pero retraso su obligación de informar a la Comisión del Mercado de Valores de EEUU hasta el día 4, cuando ya poseía el 9,2% de las acciones de la plataforma de mensajería.
Los denunciantes indican en la demanda que el CEO de Tesla hizo "declaraciones y omisiones materialmente falsas y engañosas" al no revelar que había invertido en Twitter. Los accionistas encabezados por Marc Rasella dijeron que el retraso en la información obligatoria permitió a Musk comprar más acciones de Twitter a precios más bajos y alterar el mercado. Las acciones de Twitter subieron un 27% el 4 de abril después de que Musk revelara su participación.
Elon Musk, fuera del consejo de Twitter
La presentación de la demanda contra Elon Musk tuvo lugar de forma paralela al anuncio por parte del consejero delegado de Twitter, Parag Agrawal, de que daba marcha atrás en la entrada del magnate en el consejo de administración de la red social. "El nombramiento de Elon en el consejo iba a ser oficialmente efectivo el 9 de abril, pero Elon compartió esa misma mañana que ya no se unirá al consejo", escribió Agrawal en la red social. "Creo que esto es lo mejor", agregó el consejero delegado de Twitter.
El pasado martes, Agrawal se había mostrado, también en un tuit, "emocionado” al anunciar que Musk se uniría a la Junta Directiva de Twitter y había anticipado que iba a aportar "un gran valor" a la empresa.Según Agrawal, se trata de una decisión del propio Musk, y que cree que su decisión es la correcta.
La única reacción de Musk al anuncio de Agrawal ha sido la publicación de un tuit con el emoticón de una cara con la mano tapándose la boca en lo que parece una referencia a la censura que tanto ha criticado a los responsables de Twitter. El empresario de la movilidad eléctrica se ha convertido en el principal accionista individual de la red social, en la que quería introducir cambios sustanciales para frenar la censura y posibilitar, por ejemplo, la modificación de tuits antiguos.
