Carlos Sainz ha dejado de ser el 'pringado' de la parrilla de la Fórmula 1. Ha sustituido su coche de calle, su querido Volkswagen Golf por un impresionante Ferrari 812 Competizione. Ha ganado unos cuantos caballos con el cambio.
"Wow. ¡Qué guapo!", han sido las primeras palabras que ha podido pronunciar Carlos Sainz junior tras retirar la lona que cubría su primer Ferrari. Lo estaba esperando desde 2021, cuando pasó por la 'sastrería' de la marca de Maranello para personalizar su 812 Competizione. "Hoy es un día muy especial porque por fin me van a entregar mi primer ferrari. Eso quiere decir que no solo seré piloto de Ferrari, sino también cliente de Ferrari", afirma Sainz en un vídeo colgado en su canal de Youtube.
Un Ferrari, primer coche de Sainz
Aunque no llega a los 1.000 caballos de su monoplaza de F1, los 830 CV de su nuevo coche de calle suponen un importante salto respecto al Golf que tenía desde que sus padres se lo regalaron cuando tenía 18 años. Asegura que desde entonces no se ha comprado ningún coche.
"Es un coche que me hace muchísima ilusión. Es el primer coche que me compro", dice Sainz. En el momento de hacer su pedido, justifica su elección porque "es un Ferrari muy diferente al ferrari común que todos conocemos. El difusor y la parte trasera es espectacular".
Carlos Sainz ha sido uno de los 999 exclusivos clientes que pueden conducir este superdeportivo de calle que se vende por un precio que ronda los 500.000 euros. Si tienes ese dinero y quieres uno, no te esfuerces porque están todos ya adjudicados y vendidos.
Así es el Ferrari de Sainz
El Ferrari 812 Competizione es un alarde en la tradición de coches deportivos de Ferrari y, por supuesto, con un potente motor de gasolina V12 de 6,5 litros con par máximo a 9.500 rpm. La tecnología aplicada a los componentes del motor ha conseguido reducir su peso. Las bielas son de titanio, lo que las hace un 40% más ligeras, los pasadores del pistón están revestidos de carbono con el mismo objetivo y el cigüeñal ha reducido su peso un 3%. La aplicación de diferentes tecnologías, algunas derivadas de la F1, para conseguir la combustión mejor y más eficiente se combinan con un nuevo escape que incorpora filtro de partículas de gasolina, pero manteniendo el sonido característico de un motor Ferrari. El cambio es de doble embrague y siete velocidades.
Para refrigerar ese motor aún más potente se ha utilizado por primera vez en un V12 una toma de aire frontal que se combina con un circuito de refrigeración más eficiente. También se han rediseñado los frenos y su refrigeración porque se exige mucho de ellos, sobre todo en curva. Para reducir el peso se ha utilizado intensamente la fibra de carbono en el exterior y el interior y, por primera vez en un modelo de producción se ha utilizado una luneta trasera completamente cerrada, similar a un escudo protector de un superhéroe.
Mucha fibra de carbono
Entre las novedades destaca el uso de la dirección independiente en las cuatro ruedas, la evolución del sistema Side Slip Control (SSC) a la versión 7.0 y el desarrollo de unos nuevos neumáticos específicos Michelin Cup2R. La dirección independiente de las ruedas traseras cuenta con un nuevo sistema de gestión electrónica que permite una mejor respuesta del eje delantero y mayor agarre del trasero.
Por primera vez un Ferrari V12 ofrece llantas totalmente de fibra de carbono, lo que supone 3,7 kilos menos y están cubiertas de una capa de pintura blanca que se utiliza en la ingeniería aeroespacial.