La FIA presentó en vísperas del Gran Premio de Canadá la normativa de la próxima era de la Fórmula 1, que arrancará en 2026 y que a buen seguro dará mucho que hablar este fin de semana en Montreal. La Federación Internacional de Automovilismo desveló las claves con las que se regirán las escuderías para diseñar los nuevos coches, a falta de año y medio para que empiece una auténtica revolución.
Entre las novedades que marcarán el futuro de los monoplazas, destaca la reducción del peso y del tamaño, con coches más ligeros que los actuales y, por tanto, mayor tendencia al espectáculo en pista. La introducción de un combustible sintético y 100% sostenible también quiere ajustar el futuro de la Fórmula 1 a los nuevos tiempos que rigen el mundo del automovilismo.
ALlerones móviles delante y atrás
La aerodinámica activa pasará a tener un papel fundamental en los monoplazas con el objetivo de lograr un uso más eficiente de la energía eléctrica de los motores. Se utilizarán puntos móviles en los alerones delantero y trasero. Al estilo del DRS, pero que podrán utilizarse en todas las rectas, tanto en clasificación como en carrera, aunque no se esté pegado a menos de 1 segundo de otro coche como ocurre en la actualidad.
Las unidades de potencia volverán a ser las grandes protagonistas, con propulsores que cambian radicalmente, desaparición de la MGU-H y un incremento de la potencia eléctrica, factores ya apuntados en el debate de los últimos meses y que en su día convencieron a Audi de unirse a la parrilla y animaron a Red Bull a diseñar su propio propulsor con la colaboración de Ford.
Un coche más pequeño y más ligero
Además de los motores, con un total de seis fabricantes para diez equipos, la FIA ha decidido reducir el tamaño de los monoplazas y darle un mayor protagonismo al piloto. “Un coche más ágil”, según el anuncio que se ha hecho esta semana. El peso se reduce 30 kilos, de los actuales 798 kilos a los 768. Y la distancia entre ejes será más corta y pasa de 3600 mm a 3400, mientras que el ancho disminuirá 100 mm. El tamaño de los neumáticos se reducirá 25 mm delante y 30 en las ruedas posteriores.
Todavía restan 18 meses para que la Fórmula 1 entre en esta nueva era y aún pueden introducirse algunas modificaciones en los elementos presentados, pero a partir del próximo 2 de enero los diez equipos ya tendrán luz verde para empezar a trabajar en sus monoplazas ajustándose a estas premisas.
