La sede de BMW en Múnich ha sido víctima de un 'robo' sonado. El nuevo BMW iX, que adelanta la reinvención del SUV eléctrico, ha desaparecido del aparcamiento de la marca en presencia de Oliver Zipse, presidente de la compañía. El ladrón ha sido Christophe Waltz, un especialista en interpretar papeles de malvado en la saga 007 con el director Quentin Tarantino, que participa en un cortometraje de BMW.
Waltz ha dado el cambiazo a Zipse. Tras llegar al cuartel general de la marca con su deportivo clásico BMW 3.0 CS, el actor acude a una cita con Zipse para descubrir el nuevo iX eléctrico, que en algunos aspectos supone una evolución hasta un nuevo paradigma de la movilidad.
Del clásico al SAV eléctrico
El escéptico actor asiste a las pasionales explicaciones del presidente de BMW sobre las bondades del BMW iX, que define como un SAV en lugar de un SUV (Sport Activity Vechicle). Poco a poco, el nuevo modelo va despertando el interés del fan del deportivo clásico hasta que ve la oportunidad de dar el cambiazo.
En realidad, el promotor del 'robo' fue el asistente de inteligencia artificial del nuevo modelo, que había escuchado el deseo del actor de dirigirse a un café de Viena, su ciudad natal. Dicho y hecho. El aparcacoches que esperaba a Waltz para entregarle su deportivo clásico se queda de hielo al ver la huida del invitado en un cortometraje que promete una segunda parte en la que el actor explique cómo ha ido su prueba de conducción.