El viraje de Elon Musk como aliado acérrimo de Donald Trump con su apoyo a la extrema derecha se está volviendo en contra de Tesla como un bumerán en forma de ataques violentos. Tras sufrir destrozos en algunos concesionarios, coches y cargadores, Tesla ha sido expulsada del Salón Internacional del Automóvil de Vancouver (Canadá) debido a las preocupaciones sobre la seguridad de los organizadores.
"El Salón Internacional del Automóvil de Vancouver ha eliminado a Tesla como participante del evento de esta semana, después de que el fabricante de automóviles recibió múltiples oportunidades para retirarse voluntariamente", declaró Eric Nicholl, director ejecutivo del salón del automóvil. La organización explicó que la principal prioridad es garantizar la seguridad de los asistentes, expositores y personal del evento.
Tesla no ha emitido aún una respuesta oficial sobre su exclusión del evento. Sin embargo, la compañía se enfrenta a un clima de creciente hostilidad, especialmente desde que su CEO, Elon Musk, fue nombrado director del nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental en la administración de Donald Trump. La vinculación de Musk con el gobierno estadounidense ha generado protestas y boicots en diversas ciudades, algunas de las cuales han llevado a decisiones políticas como la eliminación de incentivos financieros para la compra de vehículos Tesla en Toronto. Además, las acciones de Tesla han caído un 35% en el último mes.
Aumento de ataques y vandalismo
La tensión en torno a Tesla ha escalado en las últimas semanas con una serie de ataques dirigidos a concesionarios, estaciones de carga y propietarios de vehículos de la marca. En Loveland, Colorado, un concesionario de Tesla fue objeto de múltiples ataques. Dos personas fueron arrestadas por incidentes que incluyeron grafitis con mensajes como "coches nazis" y el lanzamiento de un dispositivo incendiario contra las instalaciones. Durante el arresto de una de las sospechosas, las autoridades hallaron gasolina y cócteles molotov en su vehículo.
Los ataques no se han limitado a Estados Unidos. En otros países también se han reportado incidentes de vandalismo contra vehículos Tesla y cargadores de la marca. La fiscal general de Estados Unidos, Pamela Bondi, calificó estos actos como "terrorismo doméstico" y advirtió sobre consecuencias severas para los responsables. "Continuaremos con las investigaciones y garantizaremos que quienes participen en estos ataques, ya sea directamente o financiándolos desde las sombras, enfrenten la justicia", afirmó Bondi.
Elon Musk, por su parte, se pronunció en la red social X (antes Twitter) condenando la violencia. "Este nivel de violencia es una locura y está profundamente mal", escribió. "Tesla solo fabrica coches eléctricos y no ha hecho nada para merecer estos ataques perversos".
Retirada de Cybertrucks y efectos en la marca
En medio de esta crisis, Tesla también anunció una llamada a revisión de prácticamente todas las unidades de Cybertrucks vendidas en Estados Unidos debido a un defecto en un panel exterior que podría desprenderse mientras el vehículo está en movimiento. Este revés se suma a la creciente presión sobre la empresa, que ya enfrenta desafíos con la demanda de sus vehículos eléctricos en un mercado cada vez más competitivo.