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Ribera ve un "regalo demagógico" la rebaja del impuesto de matriculación

La vicepresidenta critica la enmienda aprobada por la oposición porque permite no paga el tributo con más emisiones de CO2

La Ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, visita Renault Valladolid / COCHE GLOBAL

La Ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, visita Renault Valladolid / COCHE GLOBAL

Redacción Coche Global

26.05.2021 12:56h

2 min

El zasca que le ha dado la oposición al Gobierno dando marcha atrás en la subida del impuesto de matriculación no ha sentado nada bien al Ejecutivo. La principal impulsora de la subida del impuesto que se aplicó en enero de 2021, y que ahora se podría revertir, fue Teresa Ribera, la vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Ribera ha cargado contra la enmienda aprobada por una insólita alianza de todos los partidos de la oposición y ha tachado de "regalo demagógico" la rebaja del impuesto de matriculación al incrementar los tramos de emisiones de CO2 que se tienen en cuenta para el tributo.

En la sesión de control al Ejecutivo en la Cámara Baja, Ribera subrayó que este tipo de regalos "no son buenos ni para la industria ni para los consumidores". Así, recordó que las normas europeas obligan a que los coches no emitan más de 95 gramos por kilómetro, mientras que aquí parece que algunos "grupos parlamentarios han decidido regalar la matriculación hasta los 145 gramos", dijo.

Además, subrayó que la fiscalidad de la energía es "un tema sensible para las economías domésticas y la industria", así como "para las señales que queremos dar a la sociedad".

Neutralizar el efecto del WLTP

La vicepresidenta criticaba así la enmienda impulsada por el PDeCAT a la nueva Ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal. La enmienda fue aceptada con votos del PP, Vox, Esquerra Republicana, Ciudadanos, el PDeCAT y el PRC. El PSOE y Unidas Podemos votaron en contra y el PNV se abstuvo.

La propuesta, que tiene que ser aprobada ahora en el Senado, permitiría de hecho una rebaja del impuesto de matriculación a partir de su aprobación. Eso es posible al elevar la escala de emisiones de CO2 a partir del cual se aplica el impuesto de matriculación de 120 gramos en 2020 a 145 y también eleva los umbrales de los tramos sucesivos. Con este cambio se deja sin efecto el efecto fiscal que provocó la aplicación del protocolo de emisiones WLTP, que sube las cifras de CO2 de los vehículos en unos 20 gramos de media al ser una prueba más realista. 

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