Seat acumula más de 2.100 vehículos impulsados por gas natural comprimido (GNC) en lo que va de año, tras firmar distintos acuerdos de renovación de flotas con empresas como Canon España, Lácteas del Jarama y Ametller Origen.
De esta forma, la firma española continúa con su estrategia de suministrar automóviles a las principales instituciones y compañías, reafirmando su posición de marca "líder" en España que diseña, desarrolla y produce sus vehículos en nuestro país. La Policía Municipal de Madrid también ha incorporado nueve unidades del León TGI a su parque de vehículos.
Según detalló la compañía en un comunicado, uno de los canales más destacados para la empresa ha sido el de 'Real Fleet' (renting más compra de empresas), con un 25% de las ventas (522 unidades) y un alza del 11,8% respecto al mismo periodo de 2018.
Reducción de emisiones
Seat explicó que durante lo que va de año se está constatando un "gran auge" de la demanda de la gama TGI entre las compañías empresariales y los autónomos, así como que cada vez son más las grandes flotas de empresas las que empiezan a decantarse también por la movilidad vehicular con gas natural.
La gama TGI de Seat cuenta con la etiqueta ECO de la Dirección General de Tráfico (DGT), debido a que reduce las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en torno a un 25% respecto a un modelo de gasolina; genera un 75% menos de emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) en comparación a un diésel, y presenta unas emisiones "prácticamente nulas" de partículas de hollín y de dióxido de azufre (SO2).
Además, los modelos de GNC, según datos de Seat, tienen el mejor coste por kilómetro recorrido, resultando un 50% más económico que circular con un vehículo de gasolina; un 30% más que con un modelo diésel; un 10% más frente al gas licuado de petróleo (GLP) y un 25% más que con un híbrido eléctrico no enchubable.