La cuenta atrás para las elecciones generales del 23 de julio ya ha comenzado con todas sus consecuencias legales y políticas. Desde ahora, el Gobierno tiene sus movimientos limitados por la Junta Electoral para evitar que el Consejo de Ministros se convierta en un mitin. Ese corsé amenaza algunas reformas pendientes en la automoción y la movilidad, aunque se han librado de él un retoque del Plan Moves y una convocatoria de 218 millones en ayudas a la industria.
En el mismo Consejo de Ministros que ha aprobado el decreto de Pedro Sánchez que adelanta las elecciones generales al 23 de julio tras las pérdidas de territorios importantes por parte del PSOE, ha recibido el visto bueno la disposición que modifica algunos aspectos del Plan Moves de apoyo a la movilidad eléctrica. La vicepresidenta Teresa Ribera pone en marcha así algunos cambios que habían sido anunciados meses antes y que estaban pendientes de su aprobación.
Ayuda a seminuevos eléctricos
Tal como anunció Pedro Sánchez en febrero pasado, el Gobierno subvencionará la adquisición de automóviles seminuevos eléctricos de hasta 12 meses de antigüedad, una reclamación del sector junto a otras para dinamizar la electrificación de las grandes flotas de vehículos. El decreto también aumenta de 50 a 250 los coches eléctricos nuevos de un solo propietario que pueden recibir subvención. Esta ayuda beneficiará también las flotas de administraciones públicas. Además, incrementa el número de vehículos eléctricos de demostración con ayudas ue puede vender un concesionario de 30 a 90 unidades, con una edad de los coches se amplía de 9 meses a 12.
Según explica el Gobierno, estas modificaciones se han aprobado como resultado de las recomendaciones del Grupo de Trabajo de Infraestructuras de Recarga del Vehículo Eléctrico (Gtirve), que está conformado por distintas asociaciones sectoriales y la Administración.
También ha esquivado el parón electoral la primera gran convocatoria de ayudas, por un importe de 218 millones, desde la llegada de Héctor Gómez al Ministerio de Industria. El objetivo de la convocatoria es impulsar la transformación digital y ecológica de la industria. La primera es la Línea I+D+i, que tiene como objeto fomentar la ejecución de planes de innovación y de sostenibilidad en el ámbito de la industria manufacturera.
Convocatoria de Industria
Esta línea está dotada con 188 millones de euros, de los que 74 millones son en forma de subvención y 114 millones en forma de préstamos. Los ámbitos temáticos de la convocatoria abarcan aspectos como la economía circular y la ecoinnovación aplicadas en la mejora de las cadenas de valor; la descarbonización, la eficiencia energética, las nuevas fuentes de energía renovable y reducción de emisiones contaminantes; los materiales y productos avanzados; y la innovación en procesos de calidad y seguridad.
La Línea Activa Financiación tiene como objeto apoyar el desarrollo de proyectos de investigación industrial, proyectos de desarrollo experimental, así como proyectos de innovación en materia de organización y procesos en el ámbito de la Industria Conectada 4.0. El presupuesto es de 30 millones de euros.
Pendientes del PERTE 2
Sin embargo, el sector del automóvil tenía esperanzas de que los contactos que se estaban manteniendo con el gabinete de La Moncloa y los ministerios implicados permitieran aprobar algunas reformas pendientes encaminadas a impulsar la actividad y la descarbonización. El proyecto más inmediato era la segunda convocatoria del PERTE del vehículo eléctrico, que estaba prevista para el mes de junio, según los anuncios del Ejecutivo.
Además, las patronales del sector estaban negociando con el Gobierno otros cambios en el plan Moves para conseguir que la dotación económica de hasta 1.200 millones tenga un mayor impacto positivo. La clave es agilizar la concesión de la subvención a los compradores de vehículos electrificados y a los usuarios que instalan puntos de carga.
La convocatoria de elecciones tiene lugar en plena temporada alta de ventas de vehículos, que suele alcanzar el pico anual en julio. Fuentes del sector ya han advertido del freno a la demanda de los compradores particulares y del retroceso en la visitas de clientes potenciales a concesionarios. Entre las causas apuntan a la incertidumbre económica pero también a la convocatora de las anteriores elecciones.
