El reparto de licencias de 'motosharing' que ha hecho el Ayuntamiento de Barcelona no responde al "sentido común", según Ada Colau, por lo que sufrirá modificaciones. La distribución salomónica de licencias entre las 21 empresas solicitantes puede ser un borrón y cuenta nueva, hasta el punto de que supondría quitar de las calles unas 4.200 motos de alquiler por minutos que ahora pertenecen a algunas de las cinco compañias que ya están ofreciendo el servicio aprovechando la falta de regulación específica.
La adjudicación de 331 motos a cada una de las 21 empresas solicitantes supone que las cinco operadoras actuales pasarían de disponer de 6.050 motos en la actualidad a unas 1.878. Es decir, que empresas como Cooltra y Acciona tendrían que eliminar unas 4.200 motos de sus flotas, según datos de las firmas afectadas.
Rectificación del reparto del 'motosharing'
La empresa más perjudicada es, con mucha diferencia, Cooltra a través de su filial de 'motosharing' eléctrico eCooltra. Tendría que desprenderse de casi 2.000 motos de su flota, que acaba de llegar a 2.300 vehículos en circulación. El resto del 'excedente' de motos se reparte entre las otras cuatro empresas de alquiler.
Pero las empresas que han recibido el impacto del decreto firmado por Ada Colau no tiran la toalla y siguen manteniendo esperanzas de que haya una rectificación, especialmente tras las manifestaciones de la alcaldesa. "Nos permiten entender la situación de forma diferente, pero habrá que esperar y trabajar para que la situación cambie", ha asegurado Oriol Marimon-Clos, consejero delegado de eCooltra, en declaraciones a la web Coche Global.
A su juicio, el Ayuntamiento de Barcelona ha caído en el mismo error que cometió el Ayuntamiento de Madrid en un reparto de licencias para patinetes compartidos que incluyó a empresas sin experiencia que causaron importantes problemas en el servicio. De las 23 empresas adjudicatarias, solo quedan ocho.
Riesgo de reventa de licencias
Entre las posibilidades que permitirían enmendar la situación se encuentra que las licencias que queden desiertas por el abandono de empresas adjudicatarias se repartan entre el resto. Es una posibilidad que tiene visos de convertirse en realidad puesto que el sistema de adjudicación puede dar pie a la especulación con una reventa de licencias.
"Se han presentado empresas que desconocen como funciona el 'motosharing' y los costes ocultos de un negocio que todavía es deficitario", ha advertido Marimon-Clos, que alerta del riesgo de un interés especulativo.
La alterantiva a la pérdida de licencias para operar como hasta ahora obligaría a Cooltra a intentar recolocar a una buena parte de la plantilla, formada ahora por 250 empleados directos y 400 indirectos del grupo que prestan servicios para la filial. Una alternativa podrían ser el alquiler de motos en bases ubicadas en aparcamientos en lugar de en la calle como ahora, aunque los costes serían muy elevados.
