Los motores de combustión interna están pasados de moda. Se acabó eso de presumir de que se ha reducido el consumo o las emisiones de gases. Lo que se lleva ahora son los motores que utilizan nuevas energías como fuentes de propulsión. La nueva tendencia se ve con claridad por la coincidencia del Premio al Mejor Motor del Año y algunos lanzamientos comerciales. Los híbridos están de moda.
Cuando el jurado del International Engine of the Year 2015 dijo el ganador de esta edición, los candidatos que optaban al galardón con motores de gasolina y gasóleo se dieron cuenta de que están pasados de moda. El premio al mejor motor del año fue para... el BMW i8 híbrido de gasolina y eléctrico. Es una recompensa a la importante apuesta de la marca de Múnich por la nueva movilidad eléctrica e híbrida con un vehículo que acelera de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos y que tiene unas emisiones mixtas de CO2 de 40 gramos por kilómetro. Tal como destaca BMW en un comunicado, se trata de su cuarta victoria consecutiva en la categoría absoluta.
La apuesta híbrida de BMW ganó por poca diferencia de puntos a un motor de 999 centímetros cúbicos de Ford y a otro de 1.200 de Peugeot-Citroën (PSA). También hubo galardones para otras marcas como Audi y Ferrari en unos premios que nacieron en 1999 de una revista especializada en mecánica del Reino Unido y con un jurado formado por periodistas de varios países. Sus resultados ganan notoriedad cada año hasta el punto de que las marcas de automóviles ya son motivo de acciones de marketing, como un anuncio de Peugeot en el presume de su motor. "Crear un gran motor es como crear un gran perfume: debes seleccionar los mejores ingredientes", afirma la marca en el spot.
Junto a los premios, Volkswagen acaba de lanzar al mercado el nuevo Golf GTE híbrido enchufable, su primera apuesta de gran volumen en el nuevo mercado de la electromovilidad, con un anuncio en el que la marca alemana entra de lleno en la futuro. En un momento en que los coches parece que se están convirtiendo en prolongaciones de los teléfonos inteligentes, con un gadget más como el nuevo iWatch de Apple, el sector reivindica su tradición de mecánica y de grasa, que sigue siendo la clave y la base de los vehículos. Los motores todavía no se han convertido en elementos sin valor, unas commodities al alcance de casi cualquiera, siguen siendo y lo seguirán siendo lo que mueve los coches, aunque se puedan arrancar desde una aplicación del smartphone.