El nuevo Peugeot 408 acaba de llegar al mercado, pero ya se ha hecho notar. Por su cuidado diseño, que camufla una berlina con aire de SUV coupé, y por haber superado en ventas a la berlina 508 en el primer trimestre en España. Unos meses después de haberlo sometido a la primera prueba, nos hemos vuelto a poner al volante del Peugeot 408 para conocer con más detalle un modelo arriesgado por su diseño, con unas líneas y proporciones muy cuidadas en las que la ilusión óptica y por conquistar adeptos juega un papel importante.
Las primeras entregas del 408 llegaron al mercado en el primer trimestre de 2023. En ese corto espacio de tiempo, ya ha superado las ventas de la berlina 508, con un estilo más puro y situada en el segmento superior por su longitud. Del 408 se matricularon en España 412 unidades frente a las 328 del 508, según las cifras de Anfac.
El trampantojo del Peugeot 408
Está claro que las berlinas están sufriendo con duereza el auge de los SUV, que están canibalizando e hibridándose con todas las carrocerías del mercado. Por eso Peugeot no podía desafiar al mercado y lanzar una berlina pura. En su lugar, ideó un nuevo concepto con un diseño "fuera de lo común" e "inesperado", según los argumentos de la marca francesa del grupo Stellantis.
El 408 tiene, a grandes rasgos, las proporciones de una berlina del segmento C, como fue en su día su antepasado el Peugeot 407. Sin embargo, se ha imbuido de algunas caractertísticas de los SUV, como una altura al sueldo más grande, de casi 20 centímetros, unos seis más que una berlina convencional. Sin embargo, la altura hasta el techo, de 1,478 metros, es más propia de un sedán que de un todocamino. El resultado es un trampantojo ideado por los diseñadores y los ingenieros que da un aire SUV al 408.
Además, cuenta con una parte trasera más elevada que culmina una línea de perfil con una caída coupé suave que le dan las características de un Fastback. Si a eso le sumamos las protecciones de los pasos de rueda propias de un todocamino o una versión campera, tenemos como resultado el Peugeot 408, un modelo con el que la marca quiere dar una nueva vida a las berlinas.
Diseño exterior e interior
Las líneas de diseño importan las del 308, tanto en su exterior como en su interior. En esta segunda toma de contacto hemos podido confirmar algunas de las primeras impresiones del 408. La pantalla es inusualmente apaisada y el salpicadero digital en 3D requiere una aclimatización para dominarlo. El volante achatado por los bordes sorprende por su tamaño reducido pero a medida que vamos recorriendo kilómetros vemos que resulta bastante ergonómico y manejable. El siguiente paso será el volante rectangular que ya se puede ver en algunos modelos en el mercado.
El nuevo 408 es un reflejo de la transición del sector del automóvil, tanto en los aspectos formanels como en la motorización. Ha llegado al mercado con una versión de gasolina de 130 caballos, la más asequible, junto a otras dos híbridas enchufables de 180 y 225 CV. A final de año dispondrá de otra 100% eléctrica dentro de la ofensiva de lanzamientos de Peugeot, que a partir de 2030 solo venderá coches eléctricos.
En nuestra segunda prueba nos pusimos al volante nuevamente del híbrido superior de 225 caballos y en la versión GT más equipada. El consumo oficial, medido en un test de 100 kilómetros con la batería al 100%, da un máximo de 1,3 litros de gasolina. En la práctica, logramos un consumo real de 4,6 litros, algo más bajo que en la primera prueba. Tampoco pudimos conseguir los 64 kilómetros de autonomía en modo 100% eléctrico homologados, pero sí pudimos comprobar la suavidad de la conducción con el motor de gasolina apagado.