La expectativa de que el futuro plan Renove que prepara el Gobierno pueda incluir ayudas por la compra de coches diésel y de gasolina ha puesto en pie de guerra a organizaciones ecologistas, de salud pública y movilidad, que han creado un frente en contra de los incentivos para los coches con motor de combustión interna. Solo quieren subvenciones para los coches eléctricos.
Las organizaciones de protección de la salud pública, del medio ambiente y en favor de una movilidad sostenible han hecho público un manifiesto en el que aseguran que "España no debería usar dinero público para financiar la polución creada por los combustibles fósiles".
En un comunicado, firmado por Fundación Ecología y Desarrollo, European Public Health Alliance, Fundación Renovables, Transport & Environment, Promoció del Transport Públic, Salvia y Eco-Union, piden al Gobierno, así como a todos los partidos representados en el Congreso de los Diputados, que hagan un uso "eficaz y responsable" del dinero de los ciudadanos. A su juicio, los recursos públicos deben destinarse "exclusivamente" a desarrollar una política industrial "inteligente" en el sector de la automoción, que se centre en potenciar la electromovilidad.
"Resultaría inaceptable que se pretendiese invertir un solo euro de dinero público en apoyar la compra de vehículos con motores basados en la quema de combustibles fósiles (diésel, gasolina y gas natural), al ser éstos grandes emisores de dióxido de carbono (CO2), principal gas de efecto invernadero, además de diversos contaminantes atmosféricos", han lamentado.
Pendientes del plan de Sánchez
Todo ello después de que el presidente del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, anunciase la semana pasada la aprobación de un programa de apoyo al sector de la automoción, basado en una "nueva movilidad eficiente y sostenible" tras el Covid-19. Un anuncio que, a juicio de los ecologistas, carece de "concreción".
"Las organizaciones firmantes coinciden en que hay que asegurar los puestos de trabajo del sector de la automoción, el cual es muy importante también en términos de Producto Interior Bruto (PIB) nacional, pero advierten que ello solo va a ser verdaderamente posible si se adoptan medidas de apoyo a las tecnologías que realmente tienen futuro, en el marco de la legislación europea actual", han indicado.
Ponen como ejemplo para España los planes de reactivación económica aprobados en Francia y Alemania. Se refieren a que el Gobierno de Angela Merkel no dará incentivos a los coches diésel y de gasolina, a los que se aplicará un impuesto progresivo en función de las emisiones de CO2. Sin embargo, no mencionan que, tal como anunció Merkel, los coches de combustión interna se beneficiarán de una rebaja general del IVA de tres puntos. Además, las críticas de las entidades a diésel y gasolina llegan después de que el Gobierno vasco haya aprobado ayudas de 2.000 euros por comprar un coche de combustión.
