El mercado de motocicletas ha despertado de su letargo y vuelve a subir. La recuperación de las ventas de motos ha reavivado la competencia entre las marcas con cambios estratégicos en algunos casos. La marca Kymco ha decidido dar gas y apostar por la apertura de concesionarios propios para acelerar el crecimiento y aspirar al liderazgo.
El cambio de modelo de distribución con la apertura de puntos de ventas propiedad del fabricante empezó por accidente en Barcelona. La quiebra de uno de los distribuidores más fuertes de Kymco en 2012 llevó a la marca a rescatar ese concesionario como tienda propia.
La experiencia positiva como concesionario de Kymco ha llevado a la marca a poner en marcha una nueva etapa con la apertura de dos nuevos puntos de venta regentados directamente por la marca en Valencia y Madrid. La inauguración de esos nuevos concesionarios tendrá lugar en marzo, según ha confirmado la compañía.
La primera concesión propia de Kymco en Madrid cuenta con 350 metros cuadrados y está ubicada en la milla de oro de la ciudad, en la calle Príncipe de Vergara. Este punto se suma a dos concesionarios que ya tenía la marca en Madrid regentados por empresas externas. En Valencia, el primer concesionario propio de Kymco está situado en la Avenida del Cid y tiene una superficie de 600 metros cuadrados.
Estrategia de crecimiento
La marca taiwanesa presume de tener la red comercial más pequeña y eficiente, con 60 concesionarios y 1.100 servicios oficiales Genius con una cuota del 20% en el mercado de scooters de 125cc que la convierten en la segunda empresa. Las ventas globales de la marca en España en 2018 subieron un 5,2% y llegaron a 16.242 unidades.
La apertura de tres concesionarios propios permitirá a Kymco seguir creciendo sin trasladar una presión excesiva los distribuidores. "Con la experiencia de Barcelona hemos visto que los concesionarios propios nos permiten crecer con rapidez porque los distribuidores no pueden asumir más carga financiera y de costes, que ahora asume directamente Kymco", afirma Carlos Wang, director general de motocicletas de Kymco España.
Para la compañía, los tres concesionarios propios suponen un aumento de la inversión tanto en alquileres, gestión de los puntos de venta y como en gastos financieros para abastecer el stock de motos a la venta. Los nuevos concesionarios conviven con el resto de distribuidores porque están planteados para aumentar las ventas y no para restar ventas a los puntos establecidos con anterioridad.
