Kia acaba de desvelar la nueva versión del exitoso XCeed, un crossover del segmento C del que ha vendido 51.000 unidades en Europa el pasado año. Esta carrocería, que se incorporó a la gama Ceed en 2019, con la tercera generación, recibe ahora un nuevo diseño, motorizaciones híbridas gasolina y diésel y una versión más deportiva, denominada GT-Line, con detalles exteriores que la diferencian del resto de la gama y un motor de gasolina 1.6 de 204 caballos.
El Kia XCeed se produce en la planta de Zilina (Eslovaquia) y parte de su desarrollo en carretera se ha realizado también en Europa. Se pone a la venta el próximo mes de septiembre con una garantía de siete años o 150.000 km.
Aunque tiene la misma distancia entre ejes del Ceed de cinco puertas, 2,65 metros, su carrocería es ligeramente más larga, hasta los 4,39 metros. Se consigue con unos voladizos delanteros y traseros ligeramente más largos. De hecho, de las piezas de la carrocería sólo comparte con la berlina las puertas delanteras porque es más alto que la berlina, 1,49 metros. El maletero tiene una capacidad de 426 litros que se puede ampliar hasta 1.378 plegando totalmente los asientos de la fila trasera.
USB en todas las plazas
Los cambios en el diseño que ha introducido Kia han buscado resaltar su atractivo con nueva iluminación delantera y trasera, de led, unos deflectores delanteros muy llamativos, llantas de 18 pulgadas y una instrumentación digital con pantalla de 12,3 pulgadas.
También se ha mejorado la conectividad, con actualizaciones online y reconocimiento de voz. Todas las plazas tienen puerto USB y también tiene entre las dos plazas delanteras cargador inalámbrico. También se han aumentado los sistemas de ayuda a la conducción que incorpora de serie que mejoran la seguridad activa y pasiva. Se ha mejorado el Control de Crucero Inteligente (SCC) y se ha incorporado el control de crucero inteligente basado en la navegación (NSCC) que utiliza los datos de navegación para, por ejemplo, predecir una curva próxima. Si fuera necesario para trazarla con seguridad, reduce la velocidad.
Lleva también Sistema de detección de ángulo muerto (BCA) con la alerta de colisión en ángulo muerto (BCW), detección de fatiga del conductor o asistencia de prevención de colisión en salida de aparcamiento (RCCA) que cuenta con sensores en el paragolpes trasero y una cámara posterior, para una una mejor visión al salir de una plaza de aparcamiento marcha atrás. Además incorpora asistencia de frenada de emergencia (ante una colisión frontal) con reconocimiento de peatones, reconocimiento de límites de velocidad, asistente de mantenimiento en carril, asistente de seguimiento del carril o ayuda dinámica para luces de carretera.
Más opciones de motorización
La mayor innovación se centra, sin embargo, en la nueva gama de motorizaciones. Tres motores de gasolina de inyección directa con turbocompresor (T-GDi), uno de tres cilindros 1.0 litros y 120 caballos de potencia con cambio manual de seis velocidades. El otro es un cuatro cilindros, de 1,5 litros y 160 caballos, que puede tener cambio manual de seis marchas o automático de siete con doble embrague y una versión híbrida ligera.
La versión más deportiva, el GT-Line está equipado con el motor más potente, el T-GDi de 1,6 litros y 204 caballos de potencia con caja de cambios automática de siete velocidades y doble embrague que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 7,5 segundos. Tiene además detalles de diseño que lo identifican como más deportivo, llantas específicas o detalles satinados oscuros, además de otros cambios en el interior sobretodo unos asientos personalizados con el nombre bordados en los reposacabezas y grabado en la parte inferior del volante.
Además, por primera vez, la gama contará con una versión híbrida enchufable capaz de circular en modo 100% eléctrico durante 48 km. Utiliza el motor de gasolina 1.6 de 105 caballos, combinado con un motor eléctrico de 44,5 kW y cambio automático de seis marchas.
