Tras desvelarse el pasado mes de noviembre que el parque móvil de la Guardía Civil se aproximaba al desguace con vehículos que ya habían cumplido los 15 años, algunos con más de 300.000 km y otros que no pasaban la ITV, parece que los responsables de la Benemérita están acelerando la renovación del parque.
Como regalo de Navidad la Agrupación de Tráfico ha recibido 18 nuevos Alfa Romeo Stelvio, en versiones 2.0 gasolina con 200 caballos y 2.2 diésel de 190 caballos que cumplen la normativa de emisiones Euro6D de fase II. Con ambos motores lleva tracción integral Q4 y cambio automático de ocho velocidades.
Desde hace dos años el Alfa Romeo Stelvio está en el parque móvil de la Guardia Civil de Tráfico. Además de sus prestaciones su ventaja para las tareas que desempeña la GC es la tracción integral. El sistema Q4 supervisa garantizar la mejor distribución de par entre los dos ejes delantero y trasero para conseguir la mejor adherencia al firme en situaciones de hielo, arena o piedras.
Compra polémica a Nissan
Dado que se van a utilizar como vehículos patrulla, además de estar pintados con los colores corporativos llevan sobre el techo el puente con luces de tecnología led y un panel abatible que permite emitir mensajes a los vehículos que están circulando en caso de que se produzca una incidencia.
El pasado mes de agosto se aprobó una partida de 13,2 millones de euros para adquirir 581 vehículos para la Guardia Civil, entre ellos 174 todoterrenos grandes y pequeños. La última compra fue el pasado mes de noviembre, 20 Nissan Leaf, una operación que generó cierta polémica ya que se producía solo unas semanas después de que Nissan anunciara el cierre de su fábrica de Barcelona.
No todas las operaciones llegan a buen puerto porque este mismo mes de diciembre ha vuelta a quedar desierto un concurso para 1.000 vehículos camuflados que se querían adquirir con un renting a cuatro años.
Envidia de otros cuerpos
La Guardia Civil tiene un parque móvil con unos 19.000 vehículos, de los que unos 2.000 son camiones, furgonetas o buses. Aunque en el pasado se optaba por vehículos modestos, sobrios y de producción nacional, ahora se puede encontrar de todo, desde Toyota Prius, Jeep, Land Rover o Alfa Romeo, además de Seat y Renault.
Pero por mucho que haya subido de categoría de la gama, todavía la Guardia Civil española está muy lejos de sus colegas de Dubai o Abu Dhabi que tienen a su disposición Chevrolet Camaro, Nissan GT-R, Mercedes Benz G63, Bugatti Veyron o Aston Martin One. La policía alemana utiliza el Porsche 911 como vehículo para patrullar en carretera, lo que implica que los infractores se lo piensan antes de intentar huir. Y la policía italiana, aunque tiene, en general, un parque muy similar al de España, cuenta también con algunas joyas locales, generalmente regalos de Ferrari y Lamborghini, que también se usan para patrullar en carretera.
