El nuevo Ford Kuga ha llegado al mercado para triunfar. En la prueba a fondo que hemos llevado a cabo de la versión del Ford Kuga PHEV híbrido enchufable hemos comprobado el salto que ha dado este SUV en relación con la generación anterior. Explicamos nuestra opinión y valoración sobre lo mejor y lo peor del Ford Kuga en el test de Car Review & Rating de Coche Global.
La herencia recibida por la tercera generación del Ford Kuga lanzada al mercado en 2020, que se produce en la planta de Valencia, supone una gran responsabilidad y presión para los diseñadores y desarrolladores. En 2019, el modelo fue el primer SUV en Europa con 161.400 unidades, un 5% más que en el año anterior. La segunda generación del Ford Kuga gustó mucho entre los europeos, por lo que el cambio aplicado en la renovación del modelo era arriesgado.
Sin embargo, el nuevo Kuga ha recibido una buena respuesta en el mercado al haberse adaptado bien a la evolución de las tendencias de los SUV. Si miramos la evolución entre el primer Kuga que salió al mercado en 2007 y el último modelo se aprecia con más claridad la estilización de un coche que empezó más todoterreno y ha acabado acercándose a un coupé.
El Ford Kuga más completo
Si miramos las motorizaciones del Ford Kuga en toda su historia también podemos ver con claridad el signo de los cambios en el mercado automovilístico. El nuevo Kuga es el más completo en cuanto a opciones de motorización: desde los motores de gasolina y diésel hasta una gama de tres híbridos, desde la hibridación suave, el autorrecargable y el enchufable (PHEV), es es el que hemos probado nosotros.
El Ford Kuga PHEV híbrido enchufable cuenta con un motor de gasolina de 2.5 litros y cuatro cilindros Atkinson así como un motor eléctrico y un generador, y una batería de ion-litio de 14.4 kWh. La combinación del motor térmico y el eléctrico da una potencia máxima de 225 CV, propia de un modelo GT o deportivo aunque con el inconveniente de tener que mover un peso considerable por el volumen del coche y por la batería.
Sin embargo, en nuestro test nos hemos encontrado con un vehículo que va sobrado de potencia si utilizamos los modos con más prestaciones. En cambio, si optamos por el modo Eco vamos a notar que va justo en situaciones como pendientes.
¿Cuánto gasta el Ford Kuga?
Sin duda, el capítulo más singular del Kuga PHEV es su motorización y la reducción de consumo de carburante y de emisiones de gases. La marca cuantifica en un 28% la mejora de la eficiencia del consumo de gasolina gracias a la hibridación de este modelo, con unos valores de 1,4 litros a los 100 km en ciclo de homologación WLTP y con unas emisiones de CO2 de 32 gramos.
Como suele ser habitual, esos valores son los ideales, que solo se consiguen en las pruebas de homologación pero que en la realidad el coche consume más. A medida que vamos sumando kilómetros y agotamos la autonomia eléctrica de hasta 56 kilómetros, el motor de gasolina eleva su consumo y hace que los valores se disparen, aunque en un rango moderado. Nuestra media se situó alrededor de los cuatro litros.
La autonomía en modo 100% eléctrico tampoco llegó nunca a los 56 kilómetros homologados, ya que únicamente logramos rozar los 50 kilómetros, que no están nada mal para un híbrido de este peso y con esa batería de 14,4 kWh.
Durante la conducción, la sensación es de que el sistema híbrido siempre está ahí para echar una mano al motor de gasolina. Por eso, este es uno de los híbridos enchufables que tienen una vocación más claramente eléctrica de los que hay en el mercado. Además, el Huka PHEV no es un coche electrificado silencioso, sino que presume de su alma eléctrica con un zumbido subido de tono.
Lo peor del Kuga
Una pega del Kuga PHEV, al igual que otros híbridos enchufables, es la limitación en la potencia de carga, lo que impide una recarga rápida. Las opciones son seis horas en un enchufe doméstico o unas tres horas en uno tipo Wallbox.
En su interior, el centro del salpicadero es una pantalla táctil de tamaño generoso, pero sin llegar a ser una gran tablet como las de Tesla. En el acabado ST-Line que hemos probado destacan los asientos con costuras cosidas en hilo rojo, los pedales de aleación, el volante de fondo plano y las alfombrillas y distintivitos ST-Line que refuerzan el carácter deportivo. En el exterior llama la atención un gran spoiler trasero, llantas de aleación de serie de 18 pulgadas u opcionales de 19 pulgadas, y escapes deportivos dobles.
Nuestra conclusión después de probar durante una semana el Ford Kuga PHEV es que se trata de un híbrido enchufable que tiene muchos puntos a favor, incluso el de su precio, que parte en 27.250 euros sin ayudas públicas y se sitúa en la gama más asequible de estos vehículos, y más teniendo en cuenta su equipamiento. Nuestra nota en el panel Car Review & Rating para el Ford Kuga PHEV es de un 8,2.
Este modelo es uno de los finalistas en el Premio Best Car Coche Global 2020.