A sus 75 años, el diseñador británico Paul Smith rebosa energía en la presentación de nuevo proyecto: vestir un Mini Cooper por completo. Después del acuerdo anunciado por Mini, que forma parte del grupo BMW, con el diseñador en noviembre de 2020, Paul Smith ha estado desnudando y repensando este popular modelo para darle su toque personal. Pero no se quedó ahí ya que el nuevo Mini Strip creado va mucho más allá de las habituales versiones temáticas que lanzan los fabricantes de automóviles.
El Mini Strip by Paul Smith tiene mucho más que detalles. En el exterior, el modelo tuneado parece que sea una nueva colección anti-Smith porque no sigue sus directrices habituales de colorido que caracterizan las prendas del diseñador. Ha optado por desnudar el Mini y dejarlo con una fina capa de pintura que permite apreciar el acabado final de la plancha de acero y sus imperfecciones corregidas de forma manual en el control de calidad. Probablemente, este acabado debe de haber sido uno de los principales puntos de negociación entre Paul Smith y los perfeccionistas ingenieros de Mini y BMW.
El toque de color se focaliza en el techo panorámico de plexiglás azul intenso, que contrasta con la "perfección de la imperfección" de la carrocería y deja ver un interior completamente modificado y que, en este casó sí, responde a lo que se puede esperar de Paul Smith.
Revolución interior
Al abrir las puertas "se descubren las emblemáticas rayas de Paul Smith en una vívida composición de cinco colores", explica la marca. La tapa de carga añade un toque verde neón cuando se abre, como si fuera el forro interior de una americana, mientras que el dibujo grabado de un enchufe eléctrico en la tapa es obra del propio Paul Smith.
El Mini Strip "se mantiene fiel al lema de "Simplicidad y Transparencia" también en el interior, gracias a una reducción radical", según explica Mini. Para conseguir ese efecto se han quitado todas las piezas de revestimiento (a excepción del salpicadero, la almohadilla superior y la bandeja trasera), convirtiendo la carrocería coloreada de azul en el elemento visual dominante del habitáculo.
La revolución en el interior ha modificado completamente el salpicadero dando ideas para los futuros Mini. No existe la característica pantalla insertada en un círculo central y se ha dejado que el smartphone del conductor sea el protagonista. Los únicos mandos físicos del interior están situados en la parte inferior de la columna central, donde se encuentran los interruptores de los elevalunas y la función de arranque y parada.
"Desnudando el coche"
"Conozco y amo el coche actual -indica Paul Smith en un comunicado-, pero respetando el pasado y mirando al futuro hemos creado algo muy especial. Me siento privilegiado por el hecho de que el equipo de Mini me haya dado la confianza y la libertad de pensar de forma diferente sobre como enfocar el diseño del coche. Creo que juntos hemos creado algo realmente único, volviendo a lo básico, reduciendo las cosas y desnudando el coche".