La reciente DANA que afectó al sur de Valencia no solo dejó una estela de destrucción, sino que también está teniendo un impacto significativo en el mercado de vehículos de segunda mano. En menos de un mes, la demanda y los precios de estos vehículos han experimentado un notable aumento, reflejando las necesidades de los afectados por el temporal, que provocó destrozos en más de 100.000 vehículos.
Incremento de precios en tiempo récord
Según un informe de coches.net, el precio medio de oferta de los vehículos de ocasión en la provincia de Valencia ha aumentado un +2,9%, pasando de 20.106€ a 20.687€ en tan solo 17 días. Este crecimiento es aún más pronunciado en vehículos seminuevos, cuyo precio medio supera los 40.000€, un incremento del +5,8%. Incluso los coches con más de 10 años de antigüedad han registrado una subida, alcanzando un precio promedio de 9.293€, un +2% respecto a octubre.
Demanda disparada: un 67% más en Valencia
La demanda de coches de ocasión en la provincia de Valencia se ha disparado un 67% en solo dos semanas. Este fenómeno también se replica en otras provincias de la Comunidad Valenciana, con un aumento del 40% en Alicante y del 34% en Castellón, situando el incremento total en la región en un +53%.
Este crecimiento de la demanda responde a los 120.000 vehículos dañados o inservibles tras la DANA, muchos de los cuales deben ser sustituidos rápidamente para cubrir necesidades básicas de movilidad.
Los modelos más buscados
Entre los modelos más solicitados en la Comunidad Valenciana destacan el Ford Focus, el Renault Mégane, el Volkswagen Golf, el Citroën C4 y el Seat Ibiza. Todos tienen una antigüedad media superior a los 14 años, excepto el C4, que ronda los 11 años.
El mercado de vehículos de ocasión en la Comunidad Valenciana lleva años en ascenso. En 2015, el precio medio de un coche usado era de 12.532€. Hoy, tras un aumento del +60%, este precio alcanza los 20.334€, casi triplicando el crecimiento del IPC en el mismo período. Esto evidencia el creciente esfuerzo económico de los compradores, especialmente en un contexto de necesidad urgente tras eventos como la DANA.