El Cupra Born, el primer coche 100% eléctrico de la marca y del grupo Seat, levanta el vuelo tras sufrir los problemas de suministros de componentes. Las ventas del modelo han superado ya las 20.000 unidades y acumula también más de 20.000 pedidos.
Una parte de esos 20.000 coches del Cupra Born pendientes de entregar a los clientes se debe al cuello de botella que sufrió la planta alemana de Zwickau debido a la interrupción del suministro de mazos de cableado, un componente crítico en los modelos eléctricos, procedentes de factorías de proveedores de Ucrania.
La marca confía en incrementar el ritmo de entregas del Born en los próximos meses una vez resuelto el problema de suministro de los mazos de cableado mediante plantas alternativas y la reactivación de las situadas en Ucrania a pesar de la amenaza de bombardeos y de la falta de personal reclutado por el Ejército para hacer frente a la invasión de las tropas de Rusia.
El Born, segundo pilar de Cupra
“El Cupra Born está superando nuestras expectativas”, ha indicado Ignasi Casanovas, director de Marketing de la marca en la presentación a la prensa de la nueva versión Cupra Born E-Boost, con más autonomía, más potencia y deportividad.
El Born se está convirtiendo ya en el segundo pilar de las ventas de Cupra, aunque todavía a mucha distancia del superventas Formentor. La marca Cupra sumó unas ventas de enero a agosto de 92.500 vehículos, lo que supone un 81% más que en 2021 y superar, a falta de cuatro meses, la cifra de matriculaciones de todo el ejercicio pasado.
En España, las ventas ascendieron a 9.200 vehículos de Cupra, un 36% más. El fenómeno Formentor se aprecia teniendo en cuenta que sumó 63.100 unidades en todo el mundo hasta agodsto y 8.200 en España, un 90% del total.
Déficits del mercado español
El principal país de destino del Born es Alemania, con 4.500 unidades vendidas ya, seguido del mercado del Reino Unido con casi 2.000 y Austria con 1.400. En España, las ventas llegaron a 466 unidades teniendo en cuenta la menor penetración de la movilidad eléctrica en el mercado local. De esa cifra, entre enero y mayo se vendieron únicamente 110 unidades debido al parón en la producción a partir de febrero. El ritmo subió a 356 de mayo a agosto.
Cupra atribuye el menor desarrollo de la electromovilidad en España a la falta de puntos de carga, a una fiscalidad poco atractiva en la que el IRPF se come un buen pellizco de la ayuda del Plan Moves, y a unos trámites para pedir la subvención que requieren una simplificación. A esos factores hay que sumar el menor nivel de renta per cápita de los españoles.
