Los concesionarios también se apuntan a la tendencia que pusieron en marcha las marcas fabricantes de automóviles de maximizar la rentabilidad con menos ventas. La red oficial de distribución de vehículos en España cerró el segundo trimestre del año con un incremento de la rentabilidad media hasta el 1,77% en un mercado que cayó casi un 115 en la primera mitad de 2022.
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La rentabilidad es muy superior a la del del 0,36% sobre la facturación que lograron los concesionarios en el mismo período del pasado año, cuando se vendían más turismos. La clave está en el aumento de los precios medios de venta de vehículos, tanto nuevos como de ocasión, así como por el incremento de la facturación de la posventa, según los datos de Snap-on Business Solutions.
En un año, el precio de los coches nuevos se encareció un 6,9% hasta junio, con lo que se intensifica la subida del IPC registrada en los últimos meses en el apartado de los vehículos.
Los ingresos aumentaron casi un 6% respecto al mismo período de 2021, con incrementos positivos también en la rentabilidad de ventas (+22,05%) y de posventa (+21,51%). Los gastos generales, por su parte, crecieron un 6,56% en el segundo trimestre, debido al incremento de los precios de compra de los vehículos. Por tanto, por cada coche vendido y por cada reparación, las empresas obtuvieron un mayor margen de beneficio.
Por áreas de actividad, las ventas de vehículos nuevos representó casi el 63% de la facturación y más de un tercio (35%) del resultado del ejercicio, mientras que la venta de vehículos de ocasión supuso una quinta parte de la facturación (19,68%) y de los resultados (21,23%). De su lado, el área de taller representó un 5,26% de la facturación y un 12,5% del resultado. Los recambios, por su parte, supusieron un 12% de la cifra de negocio y un 30,65% de contribución al resultado.
El gerente de Snap-on Business Solutions, David Salcedo, apuntó que la falta de stock ha obligado a los concesionarios a maximizar las unidades disponibles, aunque la tendencia es positiva para el año, apoyada en una creciente posventa.
"Han conseguido rentabilidades muy superiores a años anteriores, lo cual ha servido para suplir también las menores cifras de ventas. El único punto de mejora lo encontramos en las políticas de contención de gastos, que no han dado el resultado esperado debido al aumento de precios. Y precisamente es ahí donde más deberemos poner el foco en los próximos meses para conocer el verdadero impacto que puede tener la inflación que estamos viviendo", explicó Salcedo.