Bugatti sólo va a fabricar 99 unidades del W16 Mistral, una verdadera obra de arte sobre ruedas que, pese a su precio, cinco millones de euros sin impuestos, sin duda será una gran inversión. A la exclusividad de la serie limitada se suma que es el último Bugatti que estará propulsado por el aclamado motor W16, que supuso el renacimiento de la marca francesa a finales del siglo pasado, cuando se unió al grupo Volkswagen. Desde el lanzamiento del Veyron, en 2005, el motor W16 ha estado en el corazón de todos los Bugatti
El W16 Mistral, que toma su nombre del fuerte viento que sopla en las costas del Mediterráneo cuando cambia la estación, es un roadster construido sobre la base el Bugatti Chiron, pero con bastantes cambios y que combina elementos de arte con la más depurada tecnología. Al mismo tiempo es un homenaje al pasado de la marca y a sus elegantes automóviles, sobre todo el Type 57 Grand Raid Usine de 1934, uno de los más legendarios de la 'maison' que, como este, se vistió con los colores favoritos de Ettore Bugatti que utilizó en muchos de sus coches personales, el negro y el amarillo.
Bugatti W16 Mistral, 1.600 CV
El monocasco de fibra de carbono ha sido rediseñado para mantener la rigidez necesaria, y el motor, de ocho litros, desarrolla 1.600 caballos. Emilio Scervo, jefe del departamento de tecnología de Bugatti Rimac, explicó que “para alcanzar más de 420 km/h con un vehículo descapotable es fundamental tener una gestión eficaz tanto de la termodinámica como de la aerodinámica y, más aún, con un motor de 1.600 caballos. Tenemos que definir con mucho cuidado cómo la forma del W16 Mistral guiará el aire a través y alrededor del vehículo para lograr un buen equilibrio entre la refrigeración óptima y la aerodinámica. Y, por supuesto, hacerlo con un sentido de elegancia digno de un roadster Bugatti. El W16 Mistral es un coche pensado tanto para el uso que van a hacer de él los clientes, como para la atemporalidad que debe tener”.
Combinar una perspectiva artística y el dominio de las leyes de la física supone unir el trabajo de los equipos de diseño e ingeniería de Bugatti. El frontal del W16 Mistral reinterpreta, con una apertura más ancha, profunda y tridimensional, la típica parrilla de la marca con forma de herradura y los faros de led de cuatro elementos le dan un aire de depredador.
Achim Anscheidt, director de diseño, revela que en el diseño frontal “se reconoce la firma de Bugatti. El parabrisas envuelve los pilares formando una elegante visera y la parte delantera del vehículo se hace más vertical para crear un diseño elegante y optimizado para la velocidad”. En la trasera manda el enorme grupo óptico en forma de X invertida que cubre todo el ancho de la carrocería y que tiene también una función técnica porque el flujo de aire circula en las cavidades situadas entre las líneas de luz, lo que ayuda a regular la temperatura del motor.
Interior atemporal
El responsable de diseño de Bugatti asegura que “el W16 Mistral es un punto culminante en la historia de la marca; un automóvil que se verá en el césped de los concursos de elegancia durante decenas, incluso cientos de años. Hemos creado un interior atemporal, incluida la elección de un cuero especialmente tratado y producido según los estándares de calidad de Bugatti, que se ha utilizado para tapizar los paneles de las puertas, especialmente diseñados para el W16 Mistral”.
Un guiño a los antepasados del W16 Mistral es la inserción en la palanca del cambio de una pieza de ámbar que encierra la escultura del famoso ‘elefante danzante’ de Rembrandt Bugatti, el hermano del fundador de la marca, Ettore Bugatti.
Las primeras unidades del Bugatti W16 Mistral se empiezan a entregar en 2024 y todas tienen ya destinatario. En Europa se pudo ver por primera vez el pasado mes de septiembre en el concurso de elegancia Chantilly Arts & Elegance Richard Mille que se celebra desde 2014 en el parque del castillo de Chantilly, 45 km al norte de París. Sólo unas semanas antes, en agosto, se mostró en California en Pebble Beach, sobre la bahía de Monterrey.
