¿Es posible que alguien saque tajada de una caída de las ventas de coches? Pues sí. Las comunidades autónomas se están forrando. Literalmente. Mientras que las matriculaciones de turismos caían un 5,7% en el primer semestre de 2019, los ingresos por impuesto de matriculación que gestionan y recuadan las autonomías se dispararon un 28,7%.
La recaudación por impuesto de matriculación en España, tasa transferida a las comunidades autónomas, se situó en 305,77 millones de euros en el primer semestre del año. Según datos de la Agencia Tributaria (AEAT) recogidos por Europa Press, los ingresos públicos por este concepto en junio fueron de 52,37 millones de euros, un 13,8% más que en el mismo mes de 2018. En ese mes, las matriculaciones cayeron un 8% de media en España.
Más emisiones, más impuesto
¿Cómo es posible recaudar más cuando las ventas bajan? Sencillamente, porque la caída se centra especialmente en los coches diésel, mientras que el porcentaje de turismos de gasolina se ha disparado. Ese sorpaso en el mercado provoca un aumento de las emisiones medias de CO2, que es el indicador en el que se basa el impuesto de matriculación.
Con el aumento de la cuota de mercado de la gasolina, hay más coches que tienen que pagar el impuesto de matriculación debido a que superan el umbral de los 120 gramos de CO2 por cada 100 kilómetros recorridos que antes era más difícil llegar con los vehículos diésel. Asimismo, hay más coches que tienen que pagar tramos más elevados del impuesto de matriculación, que empieza en el 4,75% y llega hasta el 14,75% en función de las emisiones.
Las emisiones medias de dióxido de carbono (CO2) de los vehículos matriculados en España se situaron en 121 gramos por kilómetro en lo que va de año (117 gramos en 2018) y en 121 gramos en junio (117 en el mismo mes de 2018).
Sube el precio medio
Los compradores de coches tuvieron que hacer frente al pago de un cuota media por su vehículo de 466 euros durante lo que va de año (+50,3%) y de 446 euros en el mes pasado (+30%).
El precio medio de los vehículos en el primer semestre del curso (incluido el impuesto de matriculación) se situó en 17.825 euros, un 3,87% más, mientras que el importe medio contabilizado en junio fue de 17.703 euros, un 2,17% más.
Por su parte, la base imponible (valor de los vehículos) contabilizada entre enero y junio fue de 11.389 millones de euros, lo que se traduce en una caída del 6,11% respecto a la primera mitad de 2018, con una cifra mensual de 2.028 millones de euros, un 11% menos.