Aston Martin ha decidido hacer realidad algunas de las escenas de ficción de las películas de James Bond, sin duda, su mejor cliente a lo largo de la historia. La marca británica ha redefinido su modelo más exitoso, el DBX, un SUV del que ha vendido 3.000 unidades en el primer año de producción y que ha servido para recuperar una cierta rentabilidad. El objetivo ha sido aumentar la potencia y prestaciones del DBX, creando el DBX707, el SUV más poderoso del mercado con, exactamente, 7-0-7 caballos un número de reminiscencias muy literarias y cinematográficas y un coche capaz de enamorar a James Bond
El DBX707 se empezará a producir ya en la factoría de Gaydon y se pondrá a la venta en abril con la misión de reforzar el éxito del DBX mientras se culmina el desarrollo de la versión híbrida enchufable ya anunciada. Su precio no se ha revelado, pero sin duda superará los 207.000 euros de la versión actual
Para ello Aston Martin ha tomado como base el motor V8 biturbo de 4,0 litros y origen Mercedes Benz del DBX ‘convencional’ y los ingenieros los han retocado al máximo. Gracias a turbompresores con rodamientos de bolas y una calibración especial se ha conseguido un aumento de potencia de 157 caballos, hasta los 707 y de 200 Nm de par hasta los 900. Se acopla a una transmisión automática de nueve velocidades con embrague en baño de aceite que es capaz de gestionar y transmitir el par motor a las ruedas y consigue cambios de marcha más rápidos y reducir el tiempo necesario para pasar de 0 a 100 km/h en 3,3 segundos.
Velocidad máxima
Aston Martin asegura que es el más potente, pero también el más rápido sin revelar cuál ha sido la máxima velocidad que ha alcanzado en los ensayos, lo que nos hace pensar que podría incluso superar los 300 km/h.
Para gestionar la velocidad y la aceleración se ha ajustado el sistema de frenado. De serie lleva discos de freno carbocerámicos, con 42 centímetros diámetro en las ruedas delanteras y 39 en las traseras, pinzas de seis pistones y un sistema de refrigeración más eficiente. La refrigeración de los frenos también se ha mejorado con la extracción de aire de la toma principal de refrigeración y de los bajos.
De serie lleva llantas de 22 pulgadas, pero se pueden cambiar por otras de 23, en negro texturado o satinado con detalles diamantados, que proporcionan ventajas aerodinámicas, ya que el mayor diámetro del neumático mejora la respuesta de la dirección, el control primario de la carrocería y los tiempos de vuelta.
Otros componentes modificados han sido el diferencial trasero controlado electrónicamente, el chasis y la suspensión que se han sometido a un ajuste específico y la asistencia de la dirección, que se ha revisado para mejorar su respuesta.
Detalles inconfundibles
Todos estos cambios se combinan con detalles de estilo que lo hacen inconfundible. Una parrilla delantera más ancha y un lip spoiler en el alerón del techo que sirve para reducir la elevación aerodinámica y aumentar la estabilidad a altas velocidades. Incluye un difusor trasero doble de gran tamaño y un nuevo sistema de escape con cuatro tubos.
En el interior, los asientos deportivos son de serie (pero se pueden elegir los de Confort, sin coste adicional) y la consola central ha sido rediseñada para incluir nuevos botones para la selección de modos de conducción. La transmisión mantiene la marcha seleccionada, como en un deportivo, en lugar de volver a su estado predeterminado en automático si estas mucho tiempo sin cambiarla.
Sobre esta base ya sofisticada, los compradores del nuevo DBX707 podrán incluir todos los caprichos que no afecten a la base dentro del programa Q by Aston Martin (otro guiño a las novelas de Ian Fleming ya que Q es el nombre del experto que le fabrica los gadgets al espía). Este programa ofrece desde exclusivos elementos gráficos hasta componentes de fibra de carbono tintada y materiales personalizados para el interior y el exterior.
