La entrada de los automóviles en el comercio online es una tendencia que va mucho más lenta que en otros sectores. Con la excepción de Tesla, que ha impulsado un modelo de venta de sus coches por internet con una red reducida de tiendas propias, los fabricantes de vehículos defienden el potencial del 'e-commerce' pero al mismo tiempo reconocen sus limitaciones y obstáculos. Los concesionarios tradicionales pueden resultar la parte más amenazada por esa tendencia, aunque ahora pueden dar un giro de 180 grados gracias al proyecto innovador que ha puesto en marcha Hyundai en Estados Unidos de venta de coches a través de Amazon.
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El gigante del comercio electrónico tenía el ojo puesto en el suculento mercado automovilístico desde hacía tiempo. Puso en marcha una plataforma de venta de vehículos usados que no ha acabado de cuajar y ahora explora otra vía mediante una innovadora fórmula alternativa a los contratos tradicionales o los nuevos de agencia de las marcas con los concesionarios.
Tal como explicó José Muñoz, presidente de Hyundai y CEO de la filial en Norteamérica, "son nuestros concesionarios los que venderán vehículos en Amazon. Tenemos una gran fe en nuestros socios y en nuestro modelo de concesionario. Se trata de una colaboración innovadora para ayudar a llevar a los clientes y a las empresas a las salas de exposición de los concesionarios".
El papel de los concesionarios
El nuevo sistema que pone en marcha Hyundai en EEUU supone una traslación del ecosistema de los concesionarios a la plataforma líder en comercio electrónico. Abre una oportunidad para llegar a nuevos clientes tanto para los concesionarios como para la marca.
Con este sistema, Hyundai se aleja de los experimentos de otras marcas que conciben la venta por internet como un oportunidad para saltarse el concesionario y llegar directamente al cliente, relegando a sus antiguos puntos de venta al papel de meros entregadores de los turismos. Como las tiendas en las que se pueden recoger paquetes comprados en Amazon.
