La compañía catalana Walbox prevé poner en marcha su nueva planta de puntos de carga para vehículos eléctricos en la Zona Franca de Barcelona. El proyecto, en el que invertirá nueve millones de euros, es una pieza clave en el plan de expansión de la empresa, que prevé duplicar su capacidad de producción y su plantilla, hasta llegar a 800 empleados.
La nueva fábrica dará trabajo directamente a unos 200 empleados. De los 800 trabajadores con los que Wallbox espera acabar este año, una cuarta parte estará implicada directa o indirectamente en el proceso productivo, según ha indicado la firma.
Las nuevas instalaciones ocuparán una parcela de 16.800 metros cuadrados, con una nave de 11.220 metros que Wallbox adecuará para adaptarla a las actividades de producción, validación y almacenaje que se llevarán a cabo allí. La inversión se ha producido de forma paralela al proceso de reindustrialización de las naves que dejará Nissan a final de año.
Dos plantas en España y China
Actualmente, Wallbox cuenta con una fábrica en Sant Andreu de la Barca (Barcelona), desde la que suministra a los más de 60 mercados en los que comercializa sus puntos de carga, y otra planta en China destinada en exclusiva al gigante asiático.
"La nueva fábrica representa no solo un paso muy importante para el futuro de Wallbox, sino también para la industria de la automoción en España que, como en todo el mundo, camina hacia la electrificación", ha asegurado Enric Asunción, consejero delegado de Wallbox.
Las nuevas instalaciones serán una "fábrica 4.0", dotada de altos niveles de automatización, interconectada a través del internet de las cosas (IoT) y con un sistema innovador de gestión energética, que a través de la regeneración de la misma permitirá la reutilización del 75% de la energía consumida en el proceso productivo, devolviéndola a la red energética interna.
Compra de Electromaps
Además, se prevé la instalación de paneles solares fotovoltaicos con 300 kW de potencia que aportarán la capacidad de abastecer entre el 30 y el 60 % de la producción con energía solar, lo que supone el ahorro diario equivalente al consumo energético de un edificio residencial con 80 viviendas. No obstante, la previsión es que en un futuro la energía fotovoltaica se expanda y atienda hasta un 90 % de la necesidad de energía para producción.
Creada en 2015 y con sede central en Barcelona, Wallbox fabrica soluciones de carga inteligentes para vehículos eléctricos y cuenta actualmente con 400 trabajadores, repartidos en oficinas en Europa, Asia y América, así como dos fábricas propias. La firma completó en el primer semestre del año pasado una ronda de inversión de 23 millones de euros y en febrero de 2021 captó otros 33 millones para su expansión a nuevos mercados, la ampliación de las instalaciones de fabricación y la contratación de nuevos profesionales. Asimismo, Wallbox amplió su presencia en el mercado con la compra de la plataforma de usuarios de vehículos eléctricos Electromaps.