UGT y el conjunto de sindicatos de Ford en Europa han reclamado una reunión con el consejero delegado y el presidente de la compañía estadounidense para que expliquen la estrategia sobre electrificación. El sindicato UGT ha advertido de que la demora en las inversiones en la adaptación de la planta de Ford de Almussafes provocarán un escenario "bastante complejo" a partir de 2024.
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Según UGT, las primeras inversiones para transformar la fábrica de Ford Almussafes hacia la electrificación deberían estar ya en marcha, aunque ha lamentado que "la realidad es bien distinta y las dudas se han apoderado de los planes de futuro" de la compañía. El sindicato ha lamentado la congelación de los planes de Ford y que le cueste "decidir cuál es la apuesta correcta" y ha añadido que otros fabricantes "también se están replanteando su hoja de ruta sobre el futuro del automóvil y los tiempos en los que los cambios deben producirse, ya que se trata de inversiones millonarias".
"Como consecuencia de esta indecisión, en Almussafes nos vamos a encontrar en un escenario bastante complejo, ya que el próximo año dejaremos de fabricar la furgoneta (en alusión al modelo Transit), lo que lógicamente generará inestabilidad ante la falta de concreción sobre ese “futurazo” que algunos representantes de la empresa auguran en los medios", según UGT.
Acuerdo con Ford incumplido
Ante la incertidumbre reinante, el pleno del comité de empresa europeo de Ford del pasado día 13 de diciembre acordó solicitar un encuentro con el consejero delegado de Ford, Jim Farley, y con el propio presidente, Bill Ford, con el objetivo de trasladarle su opinión sobre la situación en Europa y escuchar sus propuestas.
UGT ha recordado que el acuerdo sobre electrificación, del que se derivó el último convenio colectivo, "compromete a Ford y garantiza el futuro de la fábrica, y también el de Ford Europa, por lo que lo seguiremos reivindicando hasta las más altas instancias", ha asegurado el sindicato, mayoritario en la planta valenciana. La planta de Almussafes resultó elegida para la producción de nuevops modelos eléctricos de Ford en detrimento de la alemana de Saarlouis, que la empresa cerrará si no encuentra compradores tras el fracaso de las últimas negociaciones.
"Mientras tanto, la posición de UGT se mantendrá inalterable, y así nos comprometimos en la reunión del CEEF. No negociaremos medidas de flexibilidad ni temporales ni definitivas mientras no haya ningún tipo de respuesta por parte de la compañía", ha concluido el sindicato.
