El grupo Stellantis parece haber iniciado el proceso de reducción de costes anunciado por su CEO, Carlos Tavares, hace unos días pero centrado donde menos polémica puede tener, pero sí más impacto a medio y largo plazo, los desarrollos de futuro. Tavares anunció la posibilidad de cierre de fábricas, muchas de ellas actualmente sin un volumen de trabajo que garantice su rentabilidad. Por ejemplo, la emblemática fábrica de Mirafiori en Turín estará en ERTE hasta noviembre.
La medida de un posible cierre de una gran fábrica afectaría a muchos empleados, lo que puede tener impacto en la imagen de la empresa y en las relaciones con los políticos locales. Por eso parece que el grupo resultado de la fusión de PSA y FCA ha decidido empezar los recortes por los departamentos de I+D. Ya ha habido los primeros anuncios de despidos de empleados del área de desarrollo y diseño. Ahora se ha sabido que la compañía ha decidido el cierre de la pista de pruebas situada en Yucca (Arizona) y su posterior venta. En este centro víctima de los recortes de Carlos Tavares trabajan 41 personas.
Este centro de ensayos de Arizona figuraba ya en la lista de las 18 instalaciones sobre las que la compañía informó al sindicado UAW (la principal central sindical de la automoción de Estados Unidos) que podrían cerrarse. La empresa informó que había ofrecido a los empleados de la pista una indemnización especial en el caso de que no quieran ser trasladados a otro centro de trabajo.
Instalaciones de Chrysler
Chysler había comprado a Ford estas instalaciones en 2007 por 35 millones de dólares. Ocupan una zona de más de 16 kilómetros cuadrados entre Phoenix y Las Vegas que incluyen 112 kilómetros de pista divididos en varias zonas para los ensayos de vehículos nuevos. Según varias fuentes, tras el cierre el grupo Stellantis realizará las pruebas en el Toyota Arizona Proving Ground, un circuito que la empresa japonesa abrió a otros constructores en 2021, para soportar los altos costos de mantenimiento.
El grupo Stellantis tiene en Estados Unidos otro gran centro de pruebas de una extensión similar situado en Chelsea, al oeste de Detroit (Michigan), sobre el que por ahora no ha manifestado sus intenciones de futuro.