Pocas veces un vehículo tan pequeño tiene unas repercusiones tan grandes. La compañía catalana Silence ha presentado en su nueva sede del Eixample de Barcelona su nuevo modelo S04. No se trata de una moto eléctrica más, sino de un microcoche sin emisiones diseñado para la nueva movilidad urbana con el que la empresa aspira a quedarse con la fábrica de Nissan situada en Montcada i Reixac. "Estamos como al principio, entrando en un mercado nuevo que no existe", ha asegurado Carlos Sotelo, el consejero delegado de Silence después de presentar el nuevo modelo en presencia de representantes de los gobiernos español y catalán y del Ayuntamiento de Barcelona.
El Silence S04 es un cuadriciclo eléctrico que se puede llevar sin permiso de conducir, como si fuera un ciclomotor o uno de los microcoches ya existentes, que habitualmente van equipados con un motor de moto. En este caso, Silence también le ha aplicado un motor de moto, pero de las eléctricas, de las que este año prevé producir 10.000 unidades. De hecho, el Silence S04 lleva dos baterías del mismo modelo extraíble que se puede encontrar en sus motos.
Hasta 149 km de autonomía
Con 11,2 kWh de electricidad máxima almacenada en esas baterías, el microcoche de Silence es capaz de circular un máximo de 149 kilómetros en el modo de ahorro de energía y con las condiciones de conducción óptimas y con una velocidad punta de 90 km/h en su versión más potente. El modelo de acceso tiene una velocidad máxima de 45 km/h y se venderá a partir de unos 7.500 euros junto a un nuevo sistema de suscripción para el intercambio de baterías de unos 15 euros mensuales, según ha avanzado Sotelo. En cambio, la versión más potente y equipada con extras como aire acondicionado, calefacción y ABS puede costar unos 12.000 euros adquiriendo las baterías.
La compañía ha invertido en este proyecto 30 millones de euros y empezará su andadura en la primera mitad de 2022 en su nueva planta de Sant Boi de Llobregat, aunque la firma aspira a ser la adjudicataria de la planta que dejará libre Nissan en Montcada i Reixac a final de este año. "Por las dimensiones de la nave, es la que se ajusta mejor a nuestras necesidades", ha asegurado Sotelo a los periodistas tras la presentación, aunque tampoco cierra la puerta a instalarse en la otra planta de Nissan en Sant Andreu de la Barca. La presentación del modelo ha tenido lugar unos dias antes que la comisión de reindustrialización de Nissan decida qué empresa se queda las instalaciones y recoloca a la plantilla. Para la planta principal de Barcelona pugnan la frima china Great Wall y la alianza D-Hub encabezada por la catalana QEV Technologies.
Aumento de plantilla
Este proyecto, así como el aumento de las ventas de motos eléctricas, permitirá a Silence aumentar su plantilla de los 160 empleados actuales a 400 en los próximos años. Aunque Sotelo asegura que el nuevo vehículo se dirige a un nuevo mercado en gestación, las previsiones de la compañía son de producir unas 30.000 unidades anuales en un plazo de cinco años. De momento, en el primer ejercicio esperan ensamblar unos 1.000 microcoches.
El primer test para este nuevo modelo se llevara a cabo mediante un sistema de 'carsharing' de Acciona en Madrid. El presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, participó en la presentación del S04 como representante del primer accionista de Silence.
