Seat arrancó de nuevo la actividad con la esperanza y la previsión de una mejora en el suministro de componentes que ha chocado con la realidad. La compañía ha anunciado a los sindicatos un cambio de escenario con un empeoramiento de la crisis de los microchips y del efecto contagio por la guerra de Ucrania. Ante el nuevo recorte de producción previsto, Seat ha avanzado que prepara un nuevo ERTE hasta final de 2022.
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Las previsiones más halagüeñas que hizo Seat a final de julio, justo antes de las vacaciones, se han convertido en papel mojado. La dirección de Seat ha comunicado la desconvocatoria de todos los turnos de trabajo adicionales planificados en septiembre, la supresión de un turno en la línea de montaje número dos, que monta los modelos Seat León y Cupra Formentor aunque se mantiene el refuerzo de la línea 3 (Audi A1) con un semiturno aunque pendiente de fecha.
El turno suprimido en la línea dos supone un excedente de unos 850 empleados, aunque teniendo en cuenta el refuerzo del semiturno de la línea tres, la cifra de trabajadores afectados de forma estable por el nuevo ERTE podría rondar los 600 trabajadores. Al igual que los ERTE anteriores, también se prevé la posibilidad de enviar al paro a todos los operarios en los casos de cierre total de la factoría.
La empresa ha advertido la necesidad de recuperar el ERTE que se dio por finalizado a final de junio ante la mejora de las perspectivas. Ahora, la previsión de nuevas jornadas de paro de loa producción ha llevado a la empresa a considerar que la flexibilidad interna no será suficiente para asumir ese ajuste.
Críticas sindicales a VW
Los sindicatos UGT y CCOO han recordado a la empresa que exigirán las mismas condiciones del ERTE anterior, con una mejora de la prestación por desempleo y mejoras sociales. Los sindicatos mayoritarios en el comité de empresa han criticado la precipitación en la puesta en marcha del expediente de regulación temporal de empleo, que atribuyen a "la más que deficiente gestión de esta crisis que está realizando el grupo Volkswagen".
CCOO y UGT manifiestan su deseo de que la multinacional mejore esa gestión en el aprovisionamiento de componentes con el cambio de Herbert Diess por Oliver Blume como consejero delegado.
El anuncio de Seat ha tenido lugar de forma súbita y justo después de que la fábrica de Martorell trabajar de forma parcial a final de agosto para recuperar coches no fabricados y tras el reinicio de la actividad sin parones esta semana.
