La fábrica de Seat de Martorell parará la producción en una de sus líneas durante cuatro días laborables en diciembre con el fin de ajustar la actividad a la caída de los mercados como consecuencia de la segunda ola de la pandemia de coronavirus. La compañía ha comunicado a los sindicatos un descenso de la producdión de 8.500 vehículos en relación con las previsiones.
El mercado automovilístico se está convirtiendo en una montaña rusa en la que las ventas suben y bajan de forma brusca y sin apenas avisar. Esos vaivenes en los pedidos comerciales están tensionando las fábricas de automóviles, que necesitan una antelación mínima de meses para planificar los turnos de trabajo.
Seat está viviendo en primera persona esa situación complicada. La compañía ha comunicado al comité un retroceso de las ventas y los pedidos en octubre que obligan a ajustar el volumen de actividad de la fábrica de Martorell, que en octubre puso en marcha un nuevo turno para reforzar la producción de los modelos Ibiza y Arona con la contratación en plantilla de 250 empleados de ETT.
Largas vacaciones de Navidad
Con el fin de reducir la producción en 8.500 vehículos, la empresa ha cancelado todos los turnos de trabajo adicionales de fin de semana y ha planificado un parón de cuatro días de la línea de montaje número dos, en la que se ensamblan los modelos Seat León y Cupra Formentor. Los trabajadores de esta línea disfrutarán de unas vacaciones de Navidad anticipadas y más largas con la inactividad de los días 18, 21, 22 y 23 de diciembre.
Estos días tendrán la consideración de jornada industrial, un mecanismo que tiene la empresa para adaptar la producción. La empresa ha restado importancia a lo que califica de pequeños ajustes a cargo de la flexibilidad de la jornada industrial. Los cuatro días de paro de diciembre se suman a la desconvocatoria de algunos turnos que se puesto en marcha ya en noviembre.
Preocupación sindical
Las otras dos líneas de montajes (la 1 del Ibiza y Arona y la 3, del Audi A1) mantienen su calendario básico de producción, aunque no los turnos adicionales que se habían previsto en los fines de semana de noviembre y diciembre. La empresa ha confirmado que los 250 empleados contratrados a mediados de octubre para línea 1 seguirán en sus puestos sin ninguna variación.
Los sindicatos UGT y CCOO han indicado que, pese a la "complejidad de la situación actual", no comparten "los vaivenes en la gestión" convocando jornadas extraordinarias en fin de semana que poco después han sido canceladas. "A UGT y CCOO nos preocupa la actual situación y la falta de previsión para el 2021, año de la negociación del convenio colectivo", han advertido los dos sindicatos en un comunicado conjunto.
