La fábrica de Seat de Martorell va camino de conseguir este año un récord de producción. En ese contexto, la planta necesitará reforzar su plantilla con unas 350 contrataciones en los próximos meses, según las previsiones del comité de empresa. La incorporación de los nuevos empleados dependerá de la evolución de las ventas y la producción de la marca, según advierten fuentes de la compañía.
El escenario que tiene por delante la factoría de Seat de Martorell es, por ahora, positivo. La última previsión de la dirección de Seat sitúa el volumen de producción para 2019 en 548.897 vehículos. En las proximas semanas, Seat tendrá que comunicar a los sindicatos varias medidas que obligarán al fabricante automovilístico a reforzar la plantilla con esos 350 empleados, según ha explicado Matías Carnero, presidente del comité de empresa.
Suplencias y nuevo turno
Por un lado, Seat tiene que comunicar si activa el corredor de vacaciones, un mecanismo de flexibilidad interna que distribuye los días festivos de descanso estival durante todo el verano para evitar el parón de agosto. Esa medida conlleva la necesidad de subrir vacantes para mantener las líneas de montaje en funcionamiento.
Por otro lado, Seat tiene previsto poner en marcha después de las vacaciones el tercer turno de producción del modelo León. Esa línea trabaja en la actualidad con dos turnos después de que la firma optar por retrasar la ampliación hasta septiembre coincidiendo con el arranque de la nueva generación del modelo.
Las nuevas contrataciones como empleados fijos de Seat procederían, en caso de confirmarse las previsiones, de los trabajadores que actualmente prestan servicio a través de empresas de trabajo temporal (ETT). "Si se cumplen las previsiones, necesitaremos esos 350 empleados, aunque dependerá de cómo evolucione el mercado y las otras líneas de producción", afirmó Matías Carnero durante el Salón del Automóvil de Ginebra.
La incógnita del Audi A1
Fuentes de la empresa coinciden en supeditar cualquier refuerzo de la plantilla a las necesidades del mercado, que sufre una elevada volatilidad que hace difícil hacer previsiones.
Entre las incógnitas a resolver en los próximos meses se encuentra la evolución de la producción en la línea número 3 de Martorell, que ensambla el Audi A1. En la última planificación comunicada por la compañía, el volumen de producción anual baja en 12.200 unidades al quedarse en 97.950 coches. La empresa atribuye el descenso a la falta de motores suministrados por el grupo Volkswagen, aunque el comité alerta de que las ventas están por debajo de lo previsto.
De momento, la producción del Audi A1 se detendrá cinco días en abril, lo que contrasta con los turnos adicionales previstos en tres fines de semana para el Ibiza y Arona y el León.