Los proveedores de componentes para automoción pasaron un 2020 "muy duro", aunque no tanto como se temía, según los datos facilitados por la asociación Sernauto. Para 2021, el sector espera una mejora del 10% y también la ayuda de los fondos europeos de recuperación Next Generation EU. El principal proyecto en automoción, el de la planta de baterías y el ecosistema de movilidad eléctrico de Seat y Volkswagen, arrancará con la convocatoria a final de junio o principios de julio, con lo que Sernauto confía en que se ponga en marcha antes de acabar este año 2021.
El secretario general de Industria, Raül Blanco, ha confirmado que se está avanzando en el diseño del plan y que "la intención es llevarlo a finales de junio para su aprobación al Consejo de Ministros". Posteriormente, se abriría el registro de agrupaciones empresariales para que se puedan inscribir y "de ahí se iría a septiembre para poner en marcha las convocatorias para los proyectos para los cuales se presentarán las agrupaciones empresariales". Ha remarcado el secretario general de Industria que el Perte tendrá "una estructura de cadena valor" y ha destacado que "es necesario tener cadena de valor de país que luego se conecte a nivel europeo". "Esto va de proyectos, de inversión, son tres años, hay tiempo para ir madurando estos proyectos", ha agregado.
María Helena Antolín, presidente de Sernauto, ha recordado que los proveedores aportan el 75% del valor de un coche y que ese porcentaje sigue incrementándose con la digtalización de los vehículos, aunque necesitan apoyo para la transición hacia la movilidad eléctrica.
"El año 2020 ha sido durísimo. Pero hemos demostrado nuestra capacidad de adaptación con un grado de internacionalización que ha sido clave", ha asegurado la presidenta de Sernauto.
Crecimiento del 10% en 2021
A su juicio, si no se apoya el tejido de proveedores con los fondos europeos Next Generation EU se corre el riesgo de poner en peligro el atractivo de la industria de automoción española. "No nos olvidemos que no tenemos marcas españolas, por lo que tenemos que seguir siendo muy competitivos", ha advertido Antolín.
La gran esperanza de los proveedores es el gran proyecto tractor que abanderan el Gobierno y Seat, que podría arrancar con la aprobación de las convocatorias formales a final de junio o principios de julio, según la información facilitada por el Gobierno a Sernauto. De ese proyecto podrían beneficiarse un gran número de pymes fabricantes de piezas para los nuevos automóviles.
La facturación de los proveedores en 2020 ascendió a 30.200 millones, un 15% menos que en 2019, algo más suave de lo inicialmente previsto por la pandemia. Las inversiones siguieron siendo elevadas, con un 3,6% de la facturación global, lo que supone el triple de la media de la industria.
El año pasado se cerró con 344.000 empleos directos e indirectos en los proveedores de componentes y con una reducción del 5,7% en las plantillas directas. Las exportaciones bajaron un 13,8%, ligeramente menos que la facturación global y mucho mejor que en España, con un 23% menos en el mercado local.
La "penuria" de los chips
La facturación en 2021 crecerá un 10%, lo que supone que la recuperación plena se demorará hasta 2022, mientras que el nivel de empleo se mantendrá igual que en 2020, según las previsiones hechas por la junta de Sernauto.
Los proveedores españoles tienen que lidiar, como en el resto de países, con la "penuria de semiconductores", según ha asegurado Antolín, que no ve una fecha clara de recuperación de una situación que provoca un retraso en lanzamientos de modelos y proyectos.
