La producción de Toyota sufrió en septiembre una fuerte caída en Japón que dio como resultado un estancamiento en los tres primeros trimestres de 2018. Entre enero y septiembre, Toyota produjo 7,8 millones de vehículos, lo que significa una leve subida del 0,2%. El negocio de Toyota registra grandes diferencias entre la evolución en Japón, con cifras negativas, y la del resto de mercado, que compensa parcialmente las caídas en el país de origen del fabricante automovilístico. En nueve meses, la producción en Japón bajó un 1,1%, mientras que fuera del país asiático subió un 1,1%.
La producción de Toyota en Japón cayó un 9,7% en septiembre
Las diferencias fueron mucho más evidentes en septiembre, con una caída del volumen de unidades ensambladas del 9,7% en Japón y del 1% en el resto de países, lo que dio como resultado global un descenso del 4,5%. La compañía apunta como claves de esta evolución el primer retroceso de la producción y las ventas de la marca Toyota en Japón en tres meses. Fuera de Japón, el descenso de Toyota se debió principalmente a la evolución a al baja de los mercados de Norteamérica, Asia, Australia y África.
Las ventas globales del grupo Toyota, que incluye también las marcas Lexus, Daihatsu y Hino, se incrementaron un 1,7% de enero a septiembre, aunque las matriculaciones subieron un 3,2% fuera de Japón. Las acciones de Toyota en la Bolsa de Tokio sufrieron un descenso del 1,65% en la jornada en la que la compañía publicó la evolución de sus ventas y la producción.
