Ramon Tremosa, consejero de Empresa en funciones de la Generalitat tiene "mil proyectos" sobre la mesa de su despacho, entre ellos varios de plantas de baterías. Tremosa, que forma parte del nuevo partido de Carles Puigdemont, fue a TV3 a petición propia, según admitió, para responder a las críticas por la inacción de un Govern en funciones desde hace seis meses. Se defendió atacando, por supuesto, al Gobierno central como origen de todos los males y, de paso, también a los sindicatos utilizando las plantas de baterías como armas arrojadizas. Estaba 'on fire' pero sufrió un ataque de amnesia que se le puede volver en contra en un momento en el que ha sido muy cuestionado por su tendencia a ausentarse.
"He visto mil proyectos extraordinarios. Es el momento de que el Gobierno español concrete ayudas. Necesitamos, con la vacunación, también una vacuna de optimismo económico porque estos proyectos están sobre la mesa y me están quemando en el despacho desde hace semanas", aseguró Ramon Tremosa en una entrevista en el programa estrella de la mañana de la tele pública de la Generalitat.
Críticas al Gobierno central
Aunque la presentadora, Lídia Heredia, le preguntó e insistió en varias ocasiones para que concretara esos proyectos y, especialmente, el de una multinacional "global" que solo quiere construir una fábrica de baterías en Cataluña pero no en otras partes de España, Tremosa respondió con una enigmática sonrisa alegando que no podía divulgar "los contactos empresariales" que mantenía.
Al parecer, lo que le quema más en estos momentos es una megainversión de una planta de baterías de un millón de metros cuadrados que calificó de "proyecto fabuloso", aunque no concretó si se refería al del Grupo Volkswagen y Seat o al del grupo coreano LG Chem.
"Agradecería al Gobierno español que haga posible la inversión en la planta de baterías de Cataluña. Se trata de un proyecto fabuloso. Es un gran anuncio que el Gobierno lleva semanas retrasando y la empresa puede acabar marchándose porque ya ha dicho que no esperará eternamente", ha advertido el consejero. Disparó sus críticas contra la ministra de Industria, Reyes Maroto, y salpicó también al secretario general de Industria, Raül Blanco, del que recordó que es "empleado de Acció", el organismo de promoción empresarial de la Generalitat.
Amnesia de Tremosa con Tesla
A Raül Blanco le llegaron las declaraciones de Tremosa, sobre las que mostró su sorpresa al considerar que no se corresponden con la realidad ya que "el Ministerio de Industria sigue trabajando en varios proyectos que están avanzando en colaboración con el Govern". "Si el consejero tiene problemas de comunicación con otros miembros de su Gobierno, que no nos implique a nosotros", ha indicado Blanco, que ha recordado que poco antes de que Tremosa lanzara el obús acababa de hablar con un alto cargo de la Generalitat.
Tremosa empezó con mal pie en la Conseleria de Empresa y sigue en su línea. Planteó reconvertir la fábrica de Nissan de la Zona Franca de Barcelona en una nueva zona logística, o sea, un almacén o en una planta de Tesla. Olvidó entonces y también ahora que, de hecho, Cataluña perdió en 2019 la macroinversión de su fábrica europea de vehículos y baterías, para la que la comunidad autónoma era finalista. Sin embargo, Tesla descartó a última hora el emplazamiento catalán y se decantó por Berlín, donde en los próximos meses inaugurará una factoría del tamaño de la de Seat de Martorell. El proceso de selección de la ubicación coincidió con los meses culminantes del 'procés' independentista.
En septiembre de 2019, Tremosa dio por hecha una planta de baterías en Cataluña después de los anuncios por parte de Àngels Chacón, la exconsejera despedida por no bailar al son de Puigdemont, y del presidente de la patronal Foment del Treball. Tremosa, que puede ser despedido en breve si Pere Aragonès logra formar un nuevo Gobierno, ha estado en el ojo del huracán durante todo su mandato. Hace unas semanas tuvo que dar la cara en una cumbre del Govern encabezada por Aragonès después de que los sindicatos criticaran que no había aparecido todavía por la comisión de reindustrialización de Nissan. También hizo un mutis por el foro en la presentación del proyecto de electrificación de Seat con los presidentes de la compañía y del grupo Volkswagen. Dio más importancia a la pataleta por la presencia del rey que al respaldo en público a un proyecto estratégico para el único gran fabricante automovilístico que quedará en 2022 en Cataluña.