El impulso a la producción de chips en España también se hará mediante un proyecto estratégico de recuperación y transformación económica (PERTE). Tendrá una de las mayores dotaciones económicas, 11.000 millones de inversión pública procedente de los fondos europeos Next Generation EU.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha justificado el PERTE asegurando que "los semiconductores son un elemento básico de todos los sectores energéticos y adquieren una importancia geoestratégica mundial en un contexto de transformación digital". Sánchez ha defendido que España no va a perder la carrera de la tecnología más avanzada, sino todo lo contrario: "El Gobierno quiere que nuestro país se sitúe a la vanguardia del progreso industrial y tecnológico", ha remarcado Sánchez en el foro Wake Up Spain de El Español.
Atracción de inversiones
El presidente ha destacado la "apuesta ambiciosa" por impulsar este nuevo PERTE con la finalidad de atraer importantes inversiones en la industria de los semiconductores y de las nuevas tecnologías relacionadas, que serán "clave" para alcanzar la autonomía estratégica ansiada a nivel europeo.
Las nuevas ayudas anunciadas a través del PERTE se enmarcan en la Ley Europea de Microchips impulsada por la Comisión Europea como marco común para que los países fomenten la localización de proyectos de semiconductores que reduzcan la alta dependencia de productores asiáticos de este componente electrónico. La crisis de los microchips, que está frenando la industria de automoción europea y de otros continentes, ha despertado el interés del Gobierno español y de otros países europeos por aumentar la "soberanía tecnológica e industrial".
En el contexto actual de racionamiento de los microchips. los fabricantes que tienen un acceso directo al suministro de semiconductores están ganando cuota de mercado en los mercados automovilísticos mundiales. Es el caso de Kia y Hyundai, nuevos líderes en el mercado de España, y de Toyota, que se ha situado como primera marca en Estados Unidos por primera vez en la historia.
Plan de Recuperación
Dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, el Ejecutivo ha impulsado nueve proyectos estratégicos: el Perte para el desarrollo del vehículo eléctrico y conectado; el Perte para la salud de vanguardia; el Perte de energías renovables, hidrógeno renovable y almacenamiento; el Perte agroalimentario; el Perte Nueva economía de la lengua; y el Perte Economía circular; el Perte naval; el Perte aeroespacial y el Perte de la digitalización del agua.
En total, con estos proyectos estratégicos el Gobierno calcula que se movilizarán un total de 56.000 millones de euros, de los que 19.000 provienen de los fondos europeos y el resto supone apalancar inversión privada.