El lanzamiento del nuevo Ford Kuga ha acelerado después de sufrir un retraso por la pandemia y el estado de alarma. Ahora, las líneas de montaje de la fábrica de Ford de Valencia han recuperado su actividad y han alcanzado una producción de 850 unidades diarias del nuevo SUV compacto 'made in Spain'.
El parón de la actividad y el confinamiento general paralizó la línea de montaje cuando había comenzado la escalada de produción para dar respuesta al lanzamiento comercial del Kuga. Con la reanudación de la producción en mayo, el ritmo ha ido aumentando hasta alcanzar esas 850 unidades diarias que lo convierten en el modelo de más volumen de los que se ensamblan en la factoría de Almussafes, que trabaja ya utilizando los tres turnos.
La planta dispone de la flexibilidad necesaria para adaptar su producción para responder a las preferencias del mercado en cuanto a las motorizaciones en relación con los planes iniciales de la compañía.
Electrificación de la fábrica
La marca ha depositado grandes esperanzas en la nueva generación de Kuga, que mantiene su producción en la planta valenciana y en el que la multinacional norteamericana ha invertido 750 millones de euros con importantes adaptaciones y mejoras de las instalaciones. La importancia del modelo no solo se debe a que se espera que mantenga volúmenes elevados de ventas y de producción, sino también porque puede suponer la electrificación de la factoría.
Ford confía en que la versión híbrida enchufable del Kuga se convierta en la más vendida por su encaje con las nuevas exigencias para los vehículos en el mercado automovilístico, según ha explicado Antonio Chicote, responsable de Comunicación de Producto de la compañía en España. "El Ford Kuga es el primer híbrido enchufable fabricado en España. Demuestra la importancia de la planta de Almussafes para Ford", ha asegurado en la presentación del nuevo modelo en Barcelona.
Atractivo del híbrido
El Ford Kuga híbrido enchufable con motor 2.5 PHEV de 225 caballos tiene una autonomía 100% eléctrica de hasta 56 kilómetros que permite circular sin emisiones para trayectos urbanos gracias a una batería fabricada por Samsung de 14,4 KwH. Entre los atractivos de este modelo para convertirse en un superventas se encuentran que dispone de etiqueta CERO de la DGT, unas emisiones combinadas de 26 gramos de CO2 por kilómetro y un consumo de 1,4 litros de gasolina en el modo de utilización mixta con el motor de combustión interna y el eléctrico. Debido a esas emisiones tan reducidas, la venta de este modelo también es altamente interesante para Ford con el fin de rebajar la media con el objetivo de alcanzar los 95 gramos de CO2 a final de 2020 y evitar así una posible sanción.
La versión híbrida enchufable es la que tiene un precio más elevado, con 37.800 euros frente al precio básico de 29.000 euros de la versión de gasolina Titanium 1.5 EcoBoost de 120 CV. A esos precios hay que aplicar un descuento medio de 3.240 euros y otro de 1.000 a 1.500 si se financia, así como las ayudas públicas, que pueden llegar a 4.000 euros en el nuevo Plan Renove. Con todos esos descuentos, el precio del híbrido se puede quedar en unos 29.000 euros. Además, la marca ofrece una fórmula de financiación por 250 euros al mes.
