Un nuevo respirador de emergencia ha llegado a las UCI de los hospitales españoles. Se trata del modelo Q-Vent, desarrollado por la compañía QEV Technologies en colaboración con el Hospital de Sant Pau y Eurecat que será ensamblado en la planta de Nissan de Barcelona. Al llegar con los hospitales ya abastecidos, el destino de este respirador serán países emergentes aunqeu sin concretar, según han explicado los impulsores de este proyecto coaborativo.
La planta de motores y cajas de cambio de Nissan de la Zona Franca de Barcelona empezará a fabricar el respirador esta semana con una capacidad de 180 unidades diarias. Después de ser autorizado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), se ha testado en las instalaciones del Institut de Recerca del Hospital de Sant Pau con "excelentes resultados", según un comunicado. Las primeras 20 unidades serán donadas al Institut Català de la Salut con la finalidad de seguir contribuyendo a la aportación de recursos a las UCI de Cataluña y al desarrollo del estudio clínico en curso para la optimización del equipo.
El anuncio de este nuevo respirador se produce después de que Seat haya parado la producción de su modelo el viernes pasado por la falta de pedidos de la sanidad española, según avanzó la web Coche Global.
Respirador robusto
Q-Vent es, según sus desarrolladores, un equipo portátil de 22 kilos que automatiza un dispositivo resucitador que asiste manualmente la respiración del paciente y es de fácil uso, pero, robusto y fiable, a la vez para suplir la falta de respiradores convencionales automáticos ante la situación de emergencia generada por el nuevo coronavirus en todo el mundo.
Compañeros/as de #Nissan han empezado a entregar 106 viseras realizadas con 3D, para las pantallas protectoras utilizadas por los sanitarios.
— CCOO Nissan (@ccoonissan) April 1, 2020
Esta semana un 2º turno permitirá fabricar 64 ud más.
Gracias por vuestro trabajo.#EsteVirusLoParamosUnidos#coronavirus#QuedateEnCasa pic.twitter.com/fxrh2FfdzK
Permite controlar los valores de frecuencia, presión y volumen de oxígeno aportado al paciente e incluye un sistema de seguridad con alarmas sonoras y una batería interna auxiliar que, ante una eventual falta de corriente, le da una autonomía de al menos 36 minutos.
Los empleados de Nissan también han puesto en marcha la producción de viseras para el personal sanitario mediante impresoras 3D.