La dirección y los sindicatos de la fábrica de Nissan de Barcelona han aplazado la negociación sobre el ERTE que tiene pensado aplicar la compañía. La compañía quiere conocer los detalles de los cambios que introducirá el Gobierno central en la regulación de los ERTE por fuerza mayor.
De momento, la fábrica de Nissan de la Zona Franca de Barcelona sigue paralizada desde el viernes por la tarde por falta de algunas piezas atrapadas en el bloqueo que puso en marcha la Generalitat en la zona de Igualada. Las otras plantas de Nissan en Montcada i Reixac y Sant Andreu funcionan a medio gas. Los trabajadores afectados están en su casa con la aplicación de días de flexibilidad interna con el rechazo del comité al considerar que no se anunciaron con la antelación mínima.
ERTE en Ávila
Los responsables de recursos humanos de Nissan han comunicado a los sindicatos que quieren conocer cómo quedará la regulación de los ERTE por causa de fuerza mayor con el decreto que se espera que el Gobierno apruebe este martes. Entre las novedades que podría incorporar el Ejecutivo se encuentran la reposición de los días de paro consumidos por los afectados así como la exención de las cotizaciones a la Seguridad Social por parte de las empresas, que serían asumidas por el Estado.
Nissan ya ha anunciado la aplicación ERTE en la planta de Ávila que afecta a todos los trabajadores, salvo aquellos que puedan realizar teletrabajo y alguna actividad puntual que pudiera haber. La planta, que está siendo sometida a una reconversión de fábrica de vehículos a factoría de recambios, cuenta con 200 trabajando, ya que el resto, hasta los 451, se encuentran en un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) aprobado con anterioridad mientras se produce la transición.