Nissan ha entrado ya de lleno en las pérdidas al anunciar unos números rojos provisionales de 818 millones de euros en el año fiscal que finalizó en marzo de 2020. Además, la empresa advierte de que a esa cifra habrá que sumar la provisión del coste que tendrá el plan de reestruturación con 12.500 despidos que está ultimando y que tiene en vilo la planta de Barcelona.
En solo dos meses, Nissan ha pasado de prever unas ganancias de 561 millones de euros a anunciar esos 818 millones de resultado negativo que atribuye al efecto del coronavirus. La compañía ha informado este martes al regulador bursátil japonés de que los resultados del ejercicio fiscal de 2019-2020, que va de abril a marzo, están muy por debajo de lo previsto hace dos meses. El 13 de febrero pasado, cuando el coronavirus había impactado ya con fuerza en China y estaba legando a Japón, Nissan había calculado un beneficio neto de 65.000 millones de yenes (unos 561 millones de euros) para ese periodo.
Ahora, en cambio, piensa que ese resultado se verá minorado en una cifra que oscila entre 150.000 y 160.000 millones de yenes (entre 1.294 millones y 1.380 millones de euros), lo que implica incurrir en unas pérdidas que podrían llegar a los 95.000 millones de yenes (unos 818 millones de euros al cambio actual).
Menos ventas y pérdida de cuota
Esa revisión a la baja se debe al "continuo descenso en el desempeño de la compañía por el impacto de la pandemia de COVID-19", explica. "El deterioro en el beneficio operativo incluye el impacto por la disminución en la venta de vehículos" y otros por cerca de 90.000 millones de yenes (776 millones de euros), agrega Nissan.
De hecho, la compañía ha dado a conocer hoy que sólo en el mes de marzo sus ventas globales cayeron un 42,6 % respecto a marzo de 2019, hasta 315.914 vehículos, y en el año fiscal cerrado el mes pasado la reducción fue del 13,2 %. En Estados Unidos, su principal mercado, las ventas de Nissan Motor cayeron un 48,2 % en marzo, mientras que las de China se redujeron en un 44,9 %. También indica que la producción global se redujo en marzo pasado un 41,4 % respecto al mismo mes de 2019, y en los doce meses de su ejercicio fiscal recién cerrado la disminución acumulada fue del 14,5 %.
Sin embargo, Nissan no menciona los problemas acumulados de sus ventas, que caen por encima de la media en numerosos mercados como el de la Unión Europea. En marzo, Nissan vendió un 60% menos de coches cuando la media de descenso fue del 55%, lo que se traduce en una pérdida de cuota de mercado. En el primer trimestre, las ventas de Nissan en Europa bajaron un 27% frente al 25% de media.
