El sector del automóvil está inmerso en un cambio de paradigma por el impulso de una nueva legislación en la UE, la creciente concienciación de la sociedad sobre la lucha contra la crisis climática y los avances tecnológicos. La legislación ha desempeñado un papel crucial, pero paradójicamente la “futura” normativa de emisiones EU 7 ponía en riesgo el proceso de transición justa hacia una movilidad sostenible, ya que significaba parar parte de la producción durante meses de los vehículos de combustión, principalmente de segmentos pequeños que son los que más se fabrican en España.
Artículo publicado en Auto Mobility Trends 2023. Accede al Barómetro en este enlace
Los fondos Next Generation de los PERTE, los incentivos fiscales y subvenciones para la compra de vehículos 0 emisiones están siendo parte fundamental en este cambio de paradigma y requieren de colaboración público-privada y de un mayor impulso del diálogo social de carácter tripartito. Hay ejemplos como la creación del grupo de reflexión Diagonal en Catalunya, con la participación de agentes sociales (CCOO y UGT) y de la cadena de valor de la nueva movilidad sostenible. Diálogo social y colaboración público-privada tienen que actuar como palanca para convertir los retos en oportunidad para ganar soberanía industrial y crear empleo de calidad con un modelo de formación de calidad pública dual y de formación continua “estandarizada”.
Zonas de Bajas Emisiones homogéneas
Es necesaria una normativa de ZBE homogeneizada que impulse un modelo que ponga a la persona en el centro, facilitando diferentes opciones de movilidad y con el vehículo 0 emisiones como parte de la solución. Retos que pasan por agilizar la implantación de la infraestructura de carga y su digitalización, lo que sumado a la mejora de la autonomía y rendimiento de los vehículos eléctricos será clave para dar certidumbre y acabar con alguna de las barreras a la hora de adquirir un vehículo eléctrico.
En definitiva, diálogo social y colaboración público-privada son claves para impulsar un modelo productivo sostenible alineado con los objetivos de descarbonización y de fomentar la cohesión social, apostando para ello por atraer inversiones de la cadena de valor de la movilidad sostenible que implique la creación de empleo de calidad.
