Mercedes obtuvo un buen rédito en el primer trimestre de 2023 de su estrategia de volver a sus orígenes como respuesta a la coyuntura volátil. El grupo Mercedes-Benz logró un beneficio neto de 4.011 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un incremento del 12% en comparación con los 3.586 millones de euros del mismo periodo de 2022. La clave fue centrarse en los modelos más lujosos.
La compañía ha resaltado su "sólido rendimiento" en los tres primeros meses del curso "a pesar de la incertidumbre macroeconómica" y ha achacado el aumento del beneficio a las mayores ventas de coches y furgonetas de alta gama. "Nuestro enfoque en los automóviles y camionetas de alta gama ha hecho que Mercedes-Benz sea más resistente, lo que nos permite acelerar nuestra transformación digital y eléctrica, incluso en un período de incertidumbre económica. La disciplina de costes continua, combinada con más lanzamientos de productos clave como el Mercedes-Maybach EQS SUV totalmente eléctrico, que nos mantendrá en el camino para continuar brindando resultados sostenibles", ha destacado el director financiero de Mercedes-Benz, Harald Wilhelm.
Mercedes facturó 37.516 millones de euros entre enero y marzo, lo que supone un incremento del 8% en relación con los 34.858 millones de euros del primer trimestre del ejercicio anterior. Además, su beneficio neto de explotación (Ebit) se situó en 5.504 millones de euros en el acumulado hasta marzo, un 5% más que los 5.229 millones registrados en los tres primeros meses de 2022.
Descenso de la plantilla
El grupo alemán cerró el primer trimestre del año con una plantilla de 169.355 empleados, un 1% menos que los 171.052 empleados con los que contaba en el mismo periodo del año anterior.
Mercedes-Benz Cars terminó el trimestre con un beneficio operativo de 4.148 millones de euros, un 3% menos en términos interanuales, mientras que sus ingresos subieron un 8%, hasta 27.812 millones de euros, con unas matriculaciones de 503.483 unidades, un 3% de incremento.
Mercedes-Benz Vans disparó su beneficio operativo hasta los 762 millones de euros en el acumulado hasta marzo, un 119% más, mientras que su facturación mejoró un 25%, con 4.615 millones de euros. Además, vendió 98.885 unidades en el periodo, un 12% más en términos interanuales.
Asimismo, Mercedes-Benz Mobility recortó un 26% su beneficio operativo en el primer trimestre, con 539 millones, al tiempo que su cifra de negocio se contrajo un 2%, con 6.639 millones de euros.
La previsión del grupo Mercedes-Benz para este año es lograr unos ingresos similares a los de 2022, que se situaron en 150.017 millones de euros, mientras que en su división de automóviles prevé lograr un margen de beneficio sobre las ventas de entre el 12 y el 14%.
Venta del negocio en Rusia
Por otro lado, la compañía alemana ha informado de que esta misma semana transfirió sus actividades comerciales en Rusia al consorcio ruso Avtodom. "Un paso que no tuvo efectos significativos en la rentabilidad y en los flujos de efectivo. Para Mercedes-Benz Mobility, la compañía espera una pérdida de millones de euros de tres dígitos en el rango bajo una vez que la venta se haga efectiva. No se esperan efectos significativos sobre la liquidez y los recursos de capital", ha destacado la empresa.