"Debemos proteger nuestra industria y reservar las ayudas a los productores europeos" de vehículos eléctricos. Lo ha dicho el presidente francés, Emmanuel Macron, que pide a la Unión Europea que deje atrás su ingenuidad y siga los pasos de Estados Unidos y China con una política proteccionista que dé subvenciones a la compra únicamente de coches eléctricos fabricados en Europa.
El Gobierno francés planea aumentar la ayuda de compra para familias de ingresos modestos de 6.000 a 7.000 euros por la compra de un coche eléctrico y trabaja con la industria y el sector financiero para ofrecer alquileres con opción de compra con una baja cuota mensual. Macron pretende alcanzar un acuerdo a nivel europeo para que esas ayudas que ofrecen los países se dirijan solo a los modelos fabricados en la UE.
"Los europeos son todavía demasiado ingenuos", afirmó Macron durante una entrevista con la televisión pública France 2, en la que señaló que Estados Unidos y China protegen sus respectivas industrias, mientras que la UE "está abierta". Macron recalcó que no cree en el proteccionismo comercial a nivel nacional, pero sí a escala europea frente a países que no abren sus mercados de la misma manera que lo hace la UE.
"Soberanía industrial europea"
El presidente francés, quien resaltó en varias ocasiones la necesidad de defender la "soberanía industrial europea", indicó que este asunto fue uno de los que trató hoy con el canciller alemán, Olaf Scholz, durante la reunión que ambos mantuvieron en el Elíseo. "Tuvimos una discusión muy buena", agregó.
Francia es uno de los países europeos que más ha apostado por el vehículo eléctrico, gracias a los dos grandes grupos internacionales con sede en suelo francés (Renault y Stellantis), apoyados por el Gobierno francés en este proceso de reestructuración del sector.
Tres gigabaterías de fábricas de baterías están en construcción en Francia, cuya producción surtirá a varias plantas de montaje de vehículos eléctricos, dentro de una estrategia de reindustrialización del país. El objetivo del Ejecutivo es que esas fábricas saquen de sus cadenas un total de un millón de vehículos eléctricos para 2027 y dos millones para 2030, recordó Macron.
EEUU discrimina los coches extranjeros
La propuesta de Macron llega en un momento de tensión política a raíz de la nueva ley de Estados Unidos que limita las ayudas a los coches eléctricos fabricados en el país. Recientemente, la UE y EEUU han creado un grupo de trabajo específico para abordar la Ley de Reducción de la Inflación estadounidense, según informó la Comisión Europea sobre esa normativa que preocupa a los europeos por considerar en concreto que discriminará su producción de vehículos eléctricos.
La Comisión explicó en un comunicado que el grupo se impulsó durante una reunión en Berlín entre Bjoern Seibert, jefe de Gabinete de la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el viceconsejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Mike Pyle, para tratar una serie de cuestiones prioritarias, entre ellas la reconstrucción de Ucrania.
“El grupo de trabajo abordará las preocupaciones específicas planteadas por la UE en relación con la Ley de Reducción de la Inflación”, señaló la Comisión, que agregó que ambas partes “coincidieron en la importancia de una estrecha coordinación para apoyar las cadenas de suministro sostenibles y resistentes a través del Atlántico, incluyendo para construir la economía de la energía limpia”.