La compañía Acciona Facility Services no ha perdido el tiempo del que dispone legalmente para ejecutar los 500 despidos de su personal que trabajaba para Nissan en Barcelona. Los empleados afetados por el ERE, en el que no hubo acuerdo en la negociación, han empezado a recibir las comunicaciones formales de su despido en un contexto de división de la plantilla y de una lluvia de demandas judiciales de todo tipo.
Después de la finalización del periodo de consultas del ERE, el pasado día 25 de septiembre, con un fracaso de la negociación bajo la mediación del Departamento de Treball de la Generalitat de Cataluña, empezó a correr el plazo de 15 días que tiene la empresa para comunicar su decisión sobre los despidos. A los siete días, Acciona ha empezado a enviar las comunicaciones de los despidos.
Indemnización mínima
En el caso de que no hubiera enviado esas comunicaciones en los 15 días disponibles, el ERE hubiera decaído legalmente por la inacción de la compañía. Los 500 trabajadores afectados por el ERE empezarán a salir de la compañía en breve con la indemnización mínima legal de 20 días de sueldo por año trabajado con un tope de 12 mensualidades.
El comité de Acciona Facility Services de Barcelona había pedido las mismas indemnizaciones acordadas en Nissan para sus 2.525 trabajadores afectados por el cierre de sus plantas en Barcelona, que alcanzan los 60 días de sueldo sin tope de mensualidades, una cifra muy por encima del mínimo legal que fija el Estatuto de los Trabajadores.
La ejecución del ERE de Acciona, un gigante de servicios presidido por José Manuel Entrecanales, llega en un monento en que se ha fracturado la representación de los trabajadores. Unos 320 empleados habrían manifestado su renuncia a que los sindicatos CCOO, UGT y CGT les representen legalmente y se han quedado con el bufete laboralista de la cooperativa de abogados Col.lectiu Ronda.
Lluvia de demandas
De momento, el Col.lectiu Ronda ha anunciado dos demandas judiciales, una contra el ERE al considerarlo ilegal por la mala fe de la empresa y por la ausencia de Nissan en la mesa de negociación, así como otra contra el fabricante automovilístico por sucesión de empresa al traspasar las tareas del proveedor logístico a su propio personal en lugar de asumir los 500 empleados despedidos. Anteriormente, ya había presentado otra denuncia por cesión ilegal de trabajadores al considerar que los empleados de Acciona era de facto como si fueran de la plantilla de Nissan al trabajar codo con codo con los operarios.
El sindicato CCOO también ha anunciado su voluntad de presentar una demanda para reclamar la nulidad del ERE por la falta de voluntad negociadora real de Acciona durante el proceso.
UGT FICA denunciará a la compañía Acciona por haber rescindido "unilateralmente" su contrato con Nissan y despedir con una indemnización mínima a las 556 personas que prestaban servicios en esa compañía automovilística. El Estatuto de los Trabajadores "no contempla, según UGT, la posibilidad de despedir por la rescisión unilateral de contrato", como ha hecho Acciona con los empleados que prestaban servicio en las instalaciones de Nissan en Zona Franca y Sant Andreu (Barcelona).
Mientras tanto, la producción de Nissan en la fábrica de la Zona Franca de Barcelona sigue bajo mínimos por la ausencia de los empleados de Acciona, que se dedicaban a la preparación previa de los componentes dentro de la fábrica.