La reindustrialización de las fábricas de Nissan de Barcelona y Montcada i Reixac afronta la recta final con dos proyectos que engloban la producción de varios modelos eléctricos. El proyecto de mayor volumen es el que encabeza la empresa catalana QEV Technologies, que quiere dar un salto desde el Motorsport y el desarrollo de superdeportivos exclusivos como los de Hispano Suiza a fabricar 60.000 furgonetas al año de la marca Zeroid en la Zona Franca de Barcelona. Joan Orús, consejero delegado y fundador de QEV, admite, en una entrevista con Coche Global, que están delante de "un reto enorme a nivel industrial".
"Para nosotros es un reto enorme a nivel industrial. Ya somos líderes en este momento, y una empresa de referencia, en el sector del deporte, de la movilidad eléctrica en el mundo del motorsport. Hemos sido referencia en el mundo de superdeportivos fabricando vehículos deportivos para muchas marcas entre vehículos de mucha potencia, de 1.000 a 2.000 caballos". explica Orús sintetizando la trayectoria hasta ahora de QEV, vinculada a las competiciones eléctricas Fórmula E, Extrem E, Rallycross e Hispano Suiza, entre otros clientes.
Pero la empresa se prepara para dar un salto, tanto en volumen como en aspiraciones. "Ahora asumimos el reto de la movilidad urbana, del transporte de mercancías y de personas porque creemos que es el siguiente paso para convencer a la población de que realmente el mundo de electromovilidad es la solución de cara a futuro", destaca el directivo.
Gama de la marca Zeroid
Para entrar en ese nuevo mercado y, de paso, recolocar a empleados despedidos por Nissan, QEV tiene a punto ya una gama de furgonetas y de chasis para pequeños camiones y buses bajo la marca Zeroid. Inicialmente se empezarán a ensamblar en la Zona Franca mediante el sistena denominado CKD. Se importarán de China todas las piezas de los vehículos premontados en partes que se acabarán de ensamblar en Barcelona. Orús asegura que este sistema se utilizará, con la aprobación de los sindicatos, para arrancar la actividad con más rapidez y con el compromiso de que evolucionará para trasladar la producción de piezas a proveedores más próximos a Barcelona y hacia un sistema de producción integral sin CKD.
La marca Zeroid es, según el CEO de QEV, una gama de furgonetas eléctricas y de plataformas eléctricas para autobuses, desde la más pequeña, con una batería de 40 kWh y 700 kilos de carga hasta otras medianas, grandes furgones y peqeuños camiones y autocares. "Vamos a sumar furgonetas medianas, grandes y hasta pequeños camiones y plataformas que luego venderemos a carroceros que van a convertir en autobuses eléctricos".
"La marca Zeroid ha sido para nosotros -dice Joan Orús- la punta de lanza de nuestra empresa con la que queremos lanzar al mercado una gama completa para dar soluciones integrales a las empresas que incluyan sistemas de carga, gestión de flotas, mantenimiento y formación de los empleados. Queremos romper la barrera que las flotas tienen hacia el vehículo eléctrico y sobre todo hacerlo con un proyecto rentable con vehículos que puedan amortizar en dos años y que den rentabilidad a sus empresas".
Trámites pendientes
El proyecto de reindustrialización está ahora pendiente de algunos trámites como la puesta en marcha por parte del Consorcio de la Zona Franca de un concurso para tener un operador que alquile los terrenos, aunque su demora ha puesto en pie de guerra a los sindicatos y empieza a impacientar a QEV también.
"Hemos sido elegidos -dice el directivo- como unas empresas líderes para industrializar la Zona Franca y estamos precisamente en este proceso de finalización de negociación con la mesa de industrialización tanto con Nissan, con sindicatos, como con la Generalitat y el Ministerio de Industria. Esperamos finalizar toda esta negociación en los próximos dos meses para poder realmente enfocarnos al cambio en la planta y preparar las líneas de ensamblaje para estar fabricando a partir de 2023 estos vehículos. Queremos estar fabricando en menos de tres años unas 60.000 unidades al año con toda nuestra gama de vehículos y poder dar trabajo a más de 1.000 personas".
QEV asumirá la fábrica que cerró Nissan a final de 2021 junto a la empresa también catalana Btech, que quiere resucitar la marca histórica Ebro con la base de la 'pickup' Nissan Navara."Hemos hecho una joint-venture con otra empresa que quiere lanzar la marca Ebro y juntos poder dar mucha más capacidad de producción a esta esta planta aquí en la Zona Franca. Al mismo tiempo dar trabajo a la planta de Montcada para estampación en chapa de los vehículos y además queremos desde esta fábrica ofrecer 'contramanufacturing' a empresas que quieren fabricar vehículos en Barcelona pero siempre dentro de la movilidad sostenible".
