Volvo Cars, propiedad mayoritaria del grupo chino Geely, ha interrumpido la jubilación de Hakan Samuelsson para repescarlo como CEO ante la previsión de tiempos complicados con la guerra de aranceles. Samuelsson, de 74 años, asumirá el mando de Volvo el 1 de abril de 2025 con un mandato de dos años y relevará a Jim Rowan.
El regreso de Samuelsson coincide con la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de imponer un arancel del 25% a los vehículos fabricados fuera de Estados Unidos, medida que afectará a Volvo y otros fabricantes europeos. En este contexto, Volvo busca reforzar su estrategia para hacer frente a la creciente presión en el mercado internacional.
Eric Li, presidente de la junta directiva de Volvo Cars, destacó que la industria automotriz enfrenta cambios tecnológicos acelerados y una competencia cada vez más intensa. "Hakan tiene un amplio conocimiento de nuestro grupo y una capacidad demostrada de liderazgo en entornos desafiantes", afirmó Li.
Dificultades en 2025
Samuelsson ya dirigió Volvo entre 2012 y 2022, liderando la transformación de la marca hacia la electrificación y su salida a bolsa en 2021. Posteriormente, fue presidente de Polestar hasta 2024. Su nuevo mandato busca garantizar estabilidad mientras Volvo prepara la designación de un sucesor a largo plazo. La compañía ha advertido que 2025 será un año desafiante, con dificultades para igualar el desempeño de ventas y rentabilidad de 2024.
La salida de Jim Rowan marca el fin de una etapa en la que Volvo apostó por acelerar la digitalización y la electrificación. "Ha sido un privilegio liderar Volvo Cars en este periodo de transformación", expresó Rowan en su despedida.
