El mapa de los recortes laborales y de inversiones de Ford en Europa no incluye por ahora la planta de Almussafes. La multinacional de Estados Unidos ha indultado a la factoría de Valencia en la fase inicial de los despidos por cierres y ajustes de producción. Pero el comité es cauto y advierte de que no se pueden lanzar las campanas al vuelo todavía.
El culebrón del plan de reestructuración del negocio de Ford en Europa ha empezado el año 2019 con un nuevo capítulo. Poco a poco, la filial europea de la compañía va desgranando los detalles de su estrategia para dar la vuelta a las importantes pérdidas de 2018 y conseguir una rentabilidad del 6% en relación con los ingresos.
Ford ha comunicado hoy, internamente y a toda la sociedad mediante una nota de prensa, las primeras medidas incluidas en su plan de ajuste en Europa, aunque algunas de ellas ya eran conocidas. En la lista de los primeros recortes, que comportarán miles de despidos en la plantilla de la compañía, no aparece la factoría de Almussafes, que es en estos momentos la más grande de la empresa en la Unión Europea.
Las tijeras de Ford
Las tijeras de Ford se centrarán inicialmente en sus instalaciones en Alemania, Reino Unido, Francia y Rusia. En la planta alemana de Saarlouis, la eliminación de un turno de trabajo por el cese de producción de los monovolúmenes C-Max y Grand C-Max puede provocar alrededor de 1.600 despidos, según las estimaciones sindicales.
Además, Ford cerrará la planta de transmisiones automáticas de Burdeos en agosto de 2019, trasladará su cuartel general en Reino Unido al Centro Técnico de Essex y se replanteará su presencia en la 'joint venture' de Rusia.
"Estamos tomando medidas decisivas para transformar el negocio de Ford en Europa", afirma Steven Armstrong, vicepresidente y presidente del grupo en Europa, Medio Oriente y África. "Invertiremos en los vehículos, servicios, segmentos y mercados que mejor apoyen un negocio rentable a largo plazo, creando valor para todos nuestros accionistas y entregando vehículos emotivos a nuestros clientes".
Cautela en España
Pero el indulto de Almussafes puede ser provisional ya que Carlos Faubel, responsable de UGT en el comité, ha advertido de que quedan seis meses intensos por delante en los que no se puede descartar que haya efectos sobre los más de 7.000 empleados de la fábrica valenciana. Fuentes de Ford han mantenido hasta ahora un mensaje de tranquilidad sobre los posibles impactos del plan de reestructuración en la factoría española.
Mientras tanto, la compañía sigue adelante en Almussafes con los trabajos de preparación de la nueva línea de montaje de la próxima generación del SUV superventas Kuga, con una inversión de 750 millones de euros.